El Gobierno Nacional negó que el precandidato presidencial de la izquierda, Gustavo Petro Urrego, haya sido blanco de un ataque a tiros cuando se movilizaba en un carro en Cúcuta, tal y como lo denuncia uno de sus asesores principales, el concejal de Bogotá Hollman Morris.

Morris había señalado que Petro fue víctima de un ataque de cuatro tiros en el vehículo que se movilizaba, pero fue el propio precandidato quien le desmintió.

El ministro del Interior, Guillermo Rivera, desde su cuenta de Twitter manifestó que: “Director de la Policía y el propio @petrogustavo confirman que no se presentaron disparos en Cúcuta. Policía está al frente de la situación”.

Sin embargo, desde la campaña del aspirante se emitió un comunicado en el cual se dice que “la seguridad de Gustavo Petro ofrecida por la Policía en su desplazamiento no fue confiable y eficaz, porque pudieron llegar proyectiles al carro y rompieron vidrios de la ventana izquierda trasera, detrás del conductor”.

Reportaron que hubo cuatro daños en los vidrios, “de la misma naturaleza con apariencia de disparo de fuego. Eso significa que el blindaje del carro del candidato no es seguro”.

“Los artefactos impactaron rompiendo el esquema de seguridad de la Policía y del Gobierno Nacional. Ni el carro que usa el candidato ni el esquema de seguridad pueden garantizar la vida de Gustavo Petro”, concluyeron.

Petro aclaró que no le dispararon. “No hay disparos sobre el carro en el que voy. Organizaron un sabotaje con la manifestación con un centro de mando; la cárcel y Ramiro Suárez, exalcalde a quien denuncié como asesino y paramilitar. El saboteo llegó con gente en siete buses”.

En la concentración en el Parque Santander, que espera hacer Petro -que no estaba autorizada-, previamente se habían presentado algunos enfrentamientos, que llevaron a la Policía a usar gases lacrimógenos.