El Centro Democrático no la ha tenido fácil para definir el mecanismo de selección mediante el cual elegirá a sus candidatos para los comicios locales y regionales del 27 de octubre.

Aunque las directivas les insistieron a los inscritos en  la necesidad de llegar a un consenso, tanto para la Alcaldía de Cúcuta como para la Gobernación de Norte de Santander, cumplido el plazo que se estableció para tal fin, esta opción no se concretó.

Teniendo en cuenta que una de las condiciones que se definió con los precandidatos era que en caso de que no llegaran a un acuerdo, serían los compromisarios, en conjunto con el directorio departamental, los encargados de fijar la forma mediante la cual se seleccionará a los acreedores de estos dos avales, finalmente se concretó que la ruta a seguir serán las encuestas.

Y así se lo hicieron saber el lunes las directivas regionales del uribismo a los cuatro precandidatos que hasta ese momento tenía la colectividad: el exconcejal Carlos Jaimes, el empresario Iván Gelvez, el ingeniero Juan Carlos Rosas y el empresario Jairo Yañez.

Este último, conocido por su trayectoria de años en el sector de la arcilla en la región, se convirtió en la sorpresa de la baraja, pues fue inscrito a última hora y también hará parte del proceso de escogencia.

La decisión de la encuesta, sin embargo, no fue recibida con agrado por todos los participantes y en medio de un evidente malestar, Rosas resolvió declinar su aspiración, toda vez que él era partidario de que se hiciera una consulta popular abierta, pues no se sentía confiado del mecanismo que se escogió.

No obstante, las directivas del uribismo en Norte de Santander ratificaron que no es conveniente en estos momentos generar un gasto de recursos públicos para desarrollar una consulta que, incluso, puede producir efectos contrarios al partido.

Adicionalmente, señalaron que la encuesta es el modelo que se ha venido implementando en el CD desde las presidenciales del año pasado, y de esta misma forma se ha ido replicando para los nuevos comicios en varias regiones.

Así las cosas, tanto Jaimes, como Gelvez y Yañez estuvieron de acuerdo en someterse a las reglas de juego y  participar en los cinco foros que se desarrollarán en varios puntos de la ciudad, como  preámbulo a la medición que harán varias firmas nacionales.

“Si uno cree en un partido, cree que una encuesta es el sistema ideal para solucionar la escogencia del candidato, es el camino perfecto. Eso dice cuál es el que es más acogido”, manifestó Iván Gelvez.

Carlos Jaimes, por su parte, señaló que confía en la estadística. “Si se hace idóneamente, este es un buen mecanismo”, consideró.

Primera baja para la Gobernación

Al igual que para la Alcaldía de Cúcuta, el acreedor del aval para la Gobernación por el uribismo se definirá mediante una encuesta.

Hasta el momento, cuatro serían los candidatos que se someterían a la opinión de los ciudadanos consultados: Juan Carlos García-Herreros, Laudelina Pérez Solano, Ramiro Luna Conde y Segundo Antonio González.

Yesid Navas, quien también había puesto a consideración su hoja de vida, renunció a su aspiración, pero se mantendrá acompañando el proceso y la futura campaña.

En el caso de Ramiro Luna, aunque todavía no ha manifestado su posición respecto del mecanismo que se eligió, es claro que él es uno de los más inconformes con esta decisión, toda vez que ha insistido en que la vía más adecuada y transparente es una consulta abierta, cerrada o una convención. 

El panorama en este caso quedará completamente despejado la próxima semana, una vez finalicen los foros con los precandidatos al primer cargo del departamento y se firmen los compromisos con la encuesta.

Condiciones

Según se conoció, la encuesta que ya fue aprobada por la dirección nacional del partido, tanto para la selección del candidato a la Alcaldía de Cúcuta, como para el de la Gobernación,  tendrá las siguientes condiciones y características.

-En total serán tres las firmas nacionales, de reconocida trayectoria, las que contratarán: una para hacer las consultas telefónicas, otra para las encuestas presenciales y otra que servirá de auditora de los resultados.

-Los consultados serán en un 30% militantes del uribismo y 70% otros habitantes de la ciudad y la región.

-Los costos de las encuestas, que podrían oscilar entre los $90 y 100 millones, serán asumidos en su totalidad por los precandidatos.