Solo hasta tanto el Tribunal Superior de Cúcuta confirme, revoque o modifique la condena proferida en contra de la alcaldesa de Sardinata, Yamile Rangel Calderón, se definirá si la mandataria local podrá terminar o no el periodo para el cual fue elegida, el 25 de octubre de 2015.

Rangel fue condenada la semana pasada a 64 meses de prisión (5 años y tres meses), por el delito de celebración indebida de contratos, por hechos ocurridos en agosto 2011, cuando cumplía su primera administración.

Sin embargo, sus abogados apelaron la decisión, por lo que será necesario esperar a que haya una determinación de la segunda instancia, para confirmar si procede la declaratoria de la vacancia absoluta y de esta manera el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar Laguado, debe convocar a nuevas elecciones.

Esto teniendo en cuenta que la falta se produciría cuando aún restan más de 18 meses para la terminación de dicho periodo y hay lugar a unos comicios atípicos.

Y es que si bien en el fallo proferido por el Juzgado Quinto Penal, se ordena la inhabilitación de Rangel Calderón para el ejercicio de funciones públicas durante el tiempo que permanezca detenida, la Ley 136 de 1994 es clara en que la dirigente conservadora solo podrá ser suspendida o destituida, cuando la sentencia en su contra haya quedado debidamente ejecutoriada, es decir, quede en firme en la segunda instancia.

Por esta razón, Sardinata tendrá que seguir con un alcalde encargado, mientras se resuelve el futuro de la condenada mandataria, quien desde el pasado 19 de mayo se encuentra detenida, pero con el beneficio de casa por cárcel.

El gobernador Villamizar Laguado informó que hoy consultará con su equipo jurídico si en este caso hay lugar a solicitar una terna al Partido Conservador, para elegir el encargado. Por lo pronto, el secretario de Gobierno municipal, Germán Augusto Tiría Rincón, seguirá cumpliendo esa función.

Si, por el contrario, la defensa de Yamile Rangel Calderón logra desvirtuar los argumentos de la Fiscalía y queda sin piso la decisión del Juzgado Quinto, la alcaldesa podrá retomar sus funciones y ponerse nuevamente al frente de Sardinata.

El jueves, al término de la audiencia en la que se conoció el monto de la condena, Rangel Calderón se mostró confiada de lo que sucederá en la segunda instancia y aseguró que está convencida de que podrá terminar su periodo el 31 de diciembre de 2019.

“Le agradezco a la comunidad que tenga paciencia porque ya apelamos y esperamos que en la apelación podamos aclarar que no hubo ninguna irregularidad”, dijo.

La Opinión