Una frase pronunciada por el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez, el pasado dos de mayo, durante la instalación del periodo extraordinario de sesiones del Concejo, tiene encendido el debate en las redes sociales.

La Opinión buscó el video para hacer la revisión del discurso completo pronunciado por el mandatario y verificar qué fue lo que en realidad dijo, y esto fue lo que se encontró:

En medio de la presentación del Plan de Desarrollo que guiará su administración durante los próximos cuatro años y tras hacer un análisis histórico sobre el panorama económico y social de la ciudad, Yáñez planteó cuál es la posición que, en su criterio, se ha asumido durante muchos años, de manera inconveniente, frente al Gobierno Nacional.

“Nuestra realidad, económicamente hablando, y déjenme decirlo sin querer ofender a nadie, es que Cúcuta es como un limosnero que vive colocando la mano ante el Gobierno Central, porque no somos autosuficientes en la generación de nuestros propios recursos. Solamente en recursos propios generamos el 17% de nuestro presupuesto como ciudad (sic)”, fueron las palabras pronunciadas por el mandatario.

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Para sustentar su apreciación, Yáñez trajo a colación la realidad de otras ciudades como Medellín, Barranquilla y Bogotá, que a pesar de haber atravesado momentos difíciles tomaron la decisión de “sembrar” cultura ciudadana y sentido de pertenencia.

Y, ¿cómo?, agregó el gobernante local, “(…) a partir de entender que esta situación de pordiosero tenemos que cambiarla, a partir de promover, estratégicamente, nuestra educación. Formar y querer a nuestra ciudad”.

El alcalde continúa en su intervención explicando que es justamente ese sentido de pertenencia el que le hará entender a los cucuteños que es necesario el pago de impuestos, para avanzar con el desarrollo de la ciudad.

“Nuestro desarrollo no se hará nunca a partir de condonar, a partir de rebajar. Nuestro desarrollo se hará estratégicamente, en la medida que todos nos empoderemos y pongamos en práctica nuestra propia pirinola como ciudad. Todos ponemos”, dijo.

Previo a esto, Yáñez había insistido en que en la capital nortesantandereana siempre se ha elegido el camino equivocado y es por eso que los indicadores en materia de pobreza, informalidad, desempleo y la baja calidad de la educación, muestran que las estrategias de quienes conducían los destinos de la ciudad, nunca apuntaron a resolver esos problemas.

 “Intentemos entre todos convertir este escenario en una gran oportunidad, para profundizar en sus soluciones. Entre todos tenemos que hacer el ejercicio de análisis profundo y ese liderazgo colectivo nos sacará adelante”, dijo el mandatario.

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En diferentes momentos del video, Jairo Yáñez habla de que es necesario dejar de pensar que en manos de otros están las soluciones y que se debe poner fin a la costumbre del “cortoplacismo”.

Sacado de contexto 

Al escuchar desde el primer minuto el discurso pronunciado por el gobernante local, es evidente que lo dicho por Yáñez fue sacado de contexto y que ciertamente no se estaba refiriendo a los cucuteños como “limosneros” y “pordioseros”, sino a la condición que desde siempre ha primado en la capital nortesantandereana, de depender de las ayudas que otorgue el Gobierno Nacional, para resolver los reclamos de la ciudadanía.

A finales de 2018, durante el primer Taller Construyendo País que lideró el presidente Iván Duque en Cúcuta, el alcalde de la época, César Rojas, se llevó justamente un regaño público del jefe de Estado, cuando presentó la relación de necesidades de la ciudad.

“Alcalde, yo no soy Chávez; no vengo con chequera. Más que esto, yo si le pido que salgamos a mirar cómo podemos unir esfuerzos para darle prioridad a todo lo que se necesita”, fue la respuesta que recibió Rojas en ese momento por parte de Duque y que de una u otra forma guarda relación con lo que manifiesta Yáñez en su discurso ante los concejales.

Para el concejal de la Alianza Verde, Edward Varón, desde un principio él comprendió muy bien lo que quiso decir el alcalde, al comparar a la ciudad, más no a los ciudadanos, con esa cultura que existe de hacer listas de mercado cada vez que viene un presidente o un ministro.

“Obviamente todos sabíamos que esas palabras se iban a malinterpretar y se iban a sacar de contexto por parte de la oposición y las iban a volver una matriz de opinión en contra del alcalde, pero insisto en que lo que se planteó fue mostrar cuál ha sido la actitud de la ciudad frente al tema económico, pues nunca pensamos en reactivarla de manera autónoma”, dijo.

Para otros concejales, como Leonardo Jácome, si bien es cierto que Cúcuta siempre ha sido una ciudad olvidada por el Gobierno, no fueron esas las palabras que el alcalde debió haber pronunciado.

“El alcalde se equivoca en la interpretación. Es cierto que hay una deuda histórica y por eso estamos exigiendo lo que nos corresponde por derecho propio. El asunto es ese, que lo que se debe es salir a exigir”, planteó Jácome, al reiterar que el juego de palabras que usó Yáñez no fue acertado.