Si bien el tinto que resolvieron tomarse los candidatos Humberto de la Calle (Partido Liberal) y Sergio Fajardo (Coalición Colombia), generó expectativa entre quienes buscan una alternativa diferente en esta nueva carrera por la Presidencia de la República, el café se les podría terminar aguando, pues son muchos los obstáculos que esta eventual alianza encontraría en el camino.

Uno de los aspectos más complejos para hacer posible la futura coalición es el jurídico, pues la participación de De la Calle en la consulta liberal del año pasado lo dejaría atado a cumplir el mandato que le otorgaron quienes participaron en el mecanismo de participación.

Aunque desde que surgió la idea de la alianza, son muchas las interpretaciones que se han hecho sobre los alcances de la pregunta que se les hizo en aquella oportunidad a los electores, para el constitucionalista y analista político Juan Manuel Charry es claro que el candidato liberal ya no podría participar en una consulta interpartidista, pues estas se celebraron el 11 de marzo.

“Queda la posibilidad de la renuncia, que implicaría reembolsar los gastos de la consulta a la organización electoral, lo cual  es muy difícil que se dé. Por eso, a mí me parece que las posibilidades de una alianza en este momento, jurídicamente, son muy bajas o inexistentes”, consideró Charry.

Y es que según el analista, en el hipotético caso de que el exjefe negociador decidiera renunciar para apoyar la aspiración de Sergio Fajardo, además de hacerle un fraude a la ley, se vería expuesto a cumplir lo que ordena la Ley 1475, frente a la obligatoriedad de los resultados de las consultas.

El artículo 7 de dicha norma señala lo siguiente: “En caso de incumplimiento de los resultados de las consultas o en caso de renuncia del candidato, los partidos, movimientos y/o candidatos, deberán reintegrar proporcionalmente los gastos en que hubiere incurrido la organización electoral, los cuales serán fijados por el Consejo Nacional Electoral con base en los informes que presente la Registraduría Nacional del Estado Civil. Estas sumas podrán ser descontadas de la financiación estatal que corresponda a dichos partidos y movimientos”.

De ahí que, De la Calle resolvió, antes de tomar cualquier decisión, consultar al Consejo Nacional Electoral (CNE), sobre las consecuencias legales y económicas que le acarrearía una eventual unión a la campaña de Sergio Fajardo.

“¿El Partido Liberal o el candidato Humberto de la Calle está o no obligado a reintegrar a la Organización Electoral los gastos en que esta incurrió para llevar a cabo la consulta popular del Partido Liberal del 19 de noviembre de 2017?”, fue la pregunta que le hizo el candidato al CNE y cuya respuesta se debe dar en los próximos días.

No era el momento

Tanto para el constitucionalista Juan Manuel Charry como para el doctor en Ciencia Política Yann Basset, este no fue el mejor momento para concretar una alianza entre Humberto de la Calle y Sergio Fajardo, pues además de abrir un debate jurídico, no existe la seguridad de que en esta etapa del camino dicha coalición sirva, pues creen que la misma  debió sellarse antes del 11 de marzo.

Basset considera, además, que si bien hay aspectos programáticos que acercan a los dos aspirantes, el hecho de que De la Calle represente al Partido Liberal y Fajardo una alternativa distinta de hacer política, también haría compleja la unión.

Para el experto en política, tal y como están las cosas hoy, y los resultados que muestran las encuestas, sería muy difícil que un proyecto entre el exnegociador y el exgobernador cambiara el curso de la balanza.

No obstante, Basset asegura que todavía resta un tiempo importante de campaña y que se viene la hora de los debates, los cuales son claves a la hora de definir el voto.