La tarea que se propuso el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez, desde que terminó el proceso de empalme, de poner en marcha un proyecto de modernización y reestructuración que le permita al municipio contar con un sistema de gestión de calidad interno, empezó a materializarse.

El mandatario de la ciudad firmó ayer un convenio interadministrativo con el Departamento Administrativo de la Función Pública, a partir del cual esa entidad brindará asesoría al gobierno municipal, para lograr la transformación a la que le apunta Yáñez.

Según se informó, este acuerdo está orientado a fortalecer la medición de los resultados que las entidades generen a partir del Modelo Integrado de Planeación y Gestión (MIPG), así como a ofrecer capacitaciones a los servidores públicos de la ciudad,   para que puedan optimizar la información de los planes anticorrupción y atención al ciudadano.

“Nuestro compromiso con los cucuteños está en brindar la asesoría para que tengan una administración acorde a las necesidades que sus ciudadanos requieran, más cercana y que incorpore la transformación digital que estamos, desde el Gobierno Nacional, implementando en alianza con las entidades territoriales”, señaló el director de Función Pública, Fernando Grillo.

El funcionario indicó que el convenio contempla, igualmente, el acompañamiento a los procesos de meritocracia y a la vinculación de jóvenes al servicio público.

El alcalde de Cúcuta, por su parte, reiteró que la idea de contar con la asesoría de la Función Pública es poder adelantar una medición mucho más robusta de lo que se va ejecutando, para poder rendir verdaderas cuentas a la ciudadanía.

Yáñez ha insistido desde siempre en la necesidad de contar con indicadores y por eso había dicho que además de las mediciones que arroja la Cámara de Comercio, el DANE y el ‘Cúcuta Cómo Vamos’, buscaría tener  un sistema propio de gestión, que esperan consolidar, ahora con el apoyo del Gobierno.

El convenio suscrito ayer estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2022 y no generará ningún costo.