Muchas coincidencias, pero también duros y serios reparos entre ellos mismos se vieron anoche en el primer gran debate organizado por la Universidad Simón Bolívar con los candidatos a la Alcaldía de Cúcuta,  en el que participaron ocho de los doce inscritos para los comicios del 27 de octubre.

Jaime Marthey (Partido Liberal), Luis Enrique Rivera (Polo), Juan Carlos Rosas (MAIS), José Fernando Bautista (Ciudadanos por el Cambio), Víctor Suárez (conservatismo), Carlos Mayorga (Colombia Humana-UP),  Cristian Buitrago (Colombia Justa Libres) y Jairo Yáñez (Alianza Verde), se enfrentaron por primera vez y pusieron sobre la mesa sus posturas y propuestas frente a los temas que más le preocupan hoy a los cucuteños.

Uno de los aspectos en el que estuvieron de acuerdo varios de los participantes y en el que insistieron en diferentes oportunidades, es en la necesidad de que Cúcuta dé un giro radical en la forma cómo viene siendo gobernada, puesto que coincidieron en que la ciudad ya no aguanta más  la situación que afronta actualmente.

“No puedo seguir siendo un testigo oculto y silencioso de lo que viene sucediendo en la ciudad. Con el apoyo de los jóvenes estoy motivado a levantar la voz en contra de la corrupción. La esencia de mi plan es construir ciudad a partir de principios, valores y virtudes”, manifestó el candidato de la Alianza Verde.

Durante su presentación, Cristian Buitrago también fue enfático en que Cúcuta está reclamando personas “con valores, con honestidad y que garanticen la adecuada ejecución de los recursos públicos para que estos lleguen a quienes lo necesitan y no como hemos visto, que se dilapidan y no se da en el blanco de las necesidades”.

José Fernando Bautista, aspirante por firmas, fue mucho más allá y decidió hablar con nombre propio, pues como ya lo ha dicho varias veces en la campaña, reiteró que el condenado exalcalde Ramiro Suárez Corzo no puede seguir siendo quien maneje el destino de la ciudad.

En ese sentido, cuestionó la ausencia del candidato Jorge Acevedo, quien es apoyado por el movimiento del exgobernante. “En lugar de estar aquí (en el debate), está en una playa en Cartagena. Eso es lo que tenemos que cambiar”, dijo.

En lo mismo coincidió el aspirante del conservatismo, Víctor Suárez, quien reprochó la ausencia del representante del movimiento Todos por Cúcuta. “Por qué al señor Jorge Acevedo le da tanto miedo venir a los debates si es el candidato favorito en las encuestas”, planteó.

Además de Acevedo, los otros grandes ausentes en el ejercicio académico, concebido como un aporte de la Universidad Simón Bolívar para el debate democrático que está en marcha, fueron: el exalcalde Donamaris Ramírez, el candidato del Centro Democrático, Iván Gelvez; y el del movimiento por firmas, Alternativa Democrática, Hernando Acevedo. 

Otros temas en común

Durante el cara a cara, los aspirantes también fueron consultados sobre las propuestas que tienen en materia de migración, movilidad y educación, por considerar que son algunas de las inquietudes que más asaltan hoy a los ciudadanos.

En ese sentido, varios estuvieron de acuerdo en que la crisis migratoria originada por la situación económica y social en Venezuela, no puede ser vista como un problema local, sino como un fenómeno que desbordó la capacidad de atención de los estados.

Por esa razón, plantearon que lo que se requiere es mayor atención e inversión por parte de la comunidad internacional, para darle solución a problemas como el de la atención en salud, que está desbordada.

“El mundo que está interesado en acabar el régimen de Maduro se debe trasladar a Cúcuta, pero para ayudar a la ciudad y la región”, planteó el aspirante del Polo, Luis Enrique Rivera.

De la misma forma, los ocho aspirantes que aceptaron la invitación al debate lamentaron el problema de movilidad que hoy afronta Cúcuta y varios estuvieron de acuerdo en que no es posible que la ciudad todavía no cuente con un sistema integrado de transporte, no necesariamente masivo, sino funcional, que les haga más fácil la vida a los ciudadanos.

De la misma forma, manifestaron que es necesario acabar o replantear el convenio con la Policía de Tránsito, pues la forma cómo se está aplicando no es la adecuada.
Marthey, Rivera, Rosas, Bautista, Suárez, Mayorga, Buitrago y Yáñez también respondieron diferentes preguntas de los asistentes.  

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Reproches a Marthey y Suárez

El punto más candente del debate se dio cuando el moderador, Luis Fernando Niño, les dio la oportunidad a los candidatos para que se formularan preguntas entre ellos mismos.

Los cuestionamientos en ese momento recayeron, principalmente, contra los exconcejales Jaime Marthey y Víctor Suárez, a quienes varios les reprocharon el no haber hecho nada de lo que ahora le están prometiendo a los cucuteños, cuando estuvieron ejerciendo como coadministradores del municipio.

“No entiendo cómo funcionarios públicos que hoy están aquí no tienen propuestas contundentes sobre temas  tan importantes como migración y otros, cuando las debían tener muy claras porque debieron haber hecho algo por eso”, les reprochó Jairo Yáñez.

En este mismo sentido se pronunció el candidato de la Colombia Humana-UP, Carlos Mayorga, quien les cuestionó el para qué participar en política, “si lo han hecho de manera ineficiente. Por qué no se unen para combatir la corrupción que tanto han apoyado”, dijo.

Los dos excabildantes se defendieron asegurando que nunca cumplieron funciones públicas, pues su papel fue de servidores, y que si bien, en el caso de Suárez, acepta haber cometido errores en la aprobación de algunos acuerdos, como la concesión de tránsito, también es cierto que se opusieron a muchos otros por considerarlas lesivos para los cucuteños.

Marthey también le refutó al aspirante de los verdes que, a diferencia de lo que él plantea, Cúcuta no puede ser manejada como una empresa, pues eso sería estar pensando en generar utilidades y de lo que se trata una administración es de responder a las necesidades de las comunidades.

Las intervenciones generaron la reacción del público que entre vivas, aplausos, gritos y reproches, interrumpieron en diferentes momentos el cierre del debate.