En los últimos años Cácota ha fortalecido el turismo ecológico, promoviendo el ingreso de caminantes a espacios naturales del páramo Santurbán.

Uno de los principales atractivos es la laguna del Cacique Cácota y como parte del plan de manejo ambiental, la administración municipal activó una serie de medidas para proteger los ecosistemas allí presentes, garantizando el equilibrio y buscando que no se pierda el encanto paisajístico.

En adelante quienes ingresen al espacio natural no podrán hacer fogatas y de acuerdo con el alcalde, Manuel Isidro Cañas, está prohibido talar especies vegetales y arrojar basuras.

De acuerdo con la coordinadora de Turismo de Cácota, Sonia Duque, también se prohibió la pesca, caza y actividades que impliquen atentar contra la fauna que depende del páramo para sobrevivir.

“Dos de las medidas más importantes son que no se permitirá instalar carpas en los quioscos y en caso de autorización solo se dará para las zonas aledañas a los pinos. Además, nadar o cualquier tipo de inmersión en la laguna será objeto de comparendo”, dijo Duque.

La líder de turismo explicó que antes de desplazarse a la laguna se dicta una charla sobre el comportamiento que deben asumir los caminantes y se sensibilizan para que contribuyan con la conservación.

Como parte del paquete de medidas tampoco se permitirá el ingreso de vehículos y el desplazamiento por lugares diferentes a los senderos ecológicos que se construyeron para proteger la vegetación y las microcuencas.

Duque explicó que quienes lleguen con mascotas deben hacer una tenencia responsable y que a los infractores se les castigará de acuerdo con la Ley 1801 de 2016 o Código Nacional de Policía y Convivencia Ciudadana.

En este sentido, manifestó que las multas van desde la tipo uno a la cuatro, que contemplan pagos entre cuatro, ocho, dieciséis y treinta salarios mínimos diarios legales vigentes.

El mayor potencial turístico de Cácota está en el sector de la laguna y en el círculo Corral de Piedra, construido hace 500 años.

Este renglón se ha convertido en la segunda opción económica del municipio, después de la agricultura, lo que permitió la llegada el año pasado de 13.200 visitantes.

En lo corrido de 2019, van 8.500 turistas de diferentes partes del país.