Por las pésimas condiciones de las vías en la vereda El Alizal de Pamplona, cerca de 120 estudiantes del Centro Educativo Rural San Miguel deben caminar hasta 3 horas para poder llegar a clases.

El transporte escolar no cubre esta ruta por las condiciones del terreno y su difícil acceso, por lo que algunos niños dejaron de asistir a clases y otros se arriesgan a caminar en medio de la tierra que se remueve, denunció Jose Antonio Pabón, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de El Alizal.

“Es triste ver que cuando se presentan las lluvias, los niños llegan emparamados a las casas y al día siguiente no quieren volver al colegio, porque están resfriados o sigue lloviendo”, sostuvo.

En ese sector que hace parte del corregimiento de Laureano Gómez, localizado en el occidente de Pamplona, el Instituto Nacional de Vías invirtió $2.520 millones, lo que en su momento representó un gran logro para la comunidad.

Sin embargo, la felicidad duró poco y en octubre de 2018 las lluvias destrozaron las obras y desde entonces los niños deben ir a pie a la escuela.

“Alcanzamos a disfrutar el carreteable poco tiempo. La Alcaldía no ha incumplido con el arreglo como debe ser”, sostuvo Pabón.

El líder campesino explicó que en el sector de Los Tubos se destrozaron más de 80 metros de placahuella y otro tramo similar más adelante, lo que les dificulta transitar y sacar sus cosechas.

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Reclamos

Pabón, indicó que ha pasado solicitudes y derechos de peticiones a la Alcaldía y Gobernación de Norte de Santander, narrándoles la situación que tienen que soportar las 500 personas que residen en ese apartado sector de Pamplona.

“Nos contestan que hay que esperar hasta la otra semana y nunca llegan las máquinas a arreglar los pasos malos”, aseguró.

El líder comunal, manifestó que el secretario de Planeación, Mohamad Amra Dayekh, siempre le argumenta que la máquina del municipio está dañada.En el pasado Consejo Municipal de Desarrollo Rural, el funcionario fue citado y solo alcanzó a decirles a los campesinos que la retroexcavadora le arreglaban un daño y poco después le surgía otra complicación por lo que pasaba varada.