Los invernaderos del Instituto Superior de Educación Rural (Iser) huelen a hierbas aromáticas, que cubren el suelo con diferentes tonalidades de verde, mientras el ambiente es copado por frondosos arbustos de tomate de árbol.

Al ingresar la vista se concentra en los colores amarillo, naranja, rojo y verde, propios de las cosecha de esta fruta éxotica.

La producción de la fruta se está haciendo de manera limpia, libre de químicos, con la novedad de que cada uno de los arbustos están rodeados de plantas medicinales, que cumplen la función de controlar la presencia de plagas como la mosca de la fruta e insectos.

Las aromáticas también hacen el control biológico de animales rastreros como babosas, caracoles, gusanos, arañas, pulgones y hormigas.

De acuerdo con el técnico del del ISER, Héctor Urbina Pérez, la idea surgió luego de conseguir semillas nativas en Mutiscua.

Así, se establecieron semilleros y al germinar solo quedaron seleccionadas 75 plántulas, actualmente en cosecha y después de 17 meses.

Para el especialista en asistencia técnica, con este procedimiento se evidencian  resultados favorables en cuanto a los controles biológicos, en especial con la mosca de la fruta que acata con frecuencia a este tipo de plantaciones.

Héctor Urbina, técnico del ISER, enseña las plantas aromáticas.

Sobre la función que cumplen las aromáticas, el especialista sostuvo que en el caso de la mosca de la fruta, prefiere alimentarse en las plantas de geranio y no atacar a los frutos.

“Vamos a hacer una investigación para establecer si la clorofila del geranio inhibe o no deja que la mosca trasmita el virus al tomate. Los frutos están sanos y ninguno se ve enfermo”, reiteró.

Otra técnica utilizada para garantizar la polinización de las plantas es alimentar las abejas con melaza, en recipientes puestos dentro del invernadero.

De esta manera durante el día hay presencia masiva de estos insectos que fecundan naturalmente las flores para que la producción sea más abundante. 

Para comprobar la efectividad del invernadero con aromáticas, se habilitaron plantaciones a cielo abierto y se hará un comparativo.

En el invernadero la temperatura está regulada. Además, cuenta con canales de ventilación y está dotado con tubería que finaliza en aspersores que se encargan de regar las plantas por un tiempo determinado, evitando el exceso de humedad o que el líquido sea poco y no llegue a las raíces.

Para no utilizar químicos como se hace en la agricultura tradicional, las plantas se protegen con hierbas aromáticas, como ajenjo, geranio, ruda, menta, valeriana, tomillo, hierbabuena y hortiga.

También hay toronjíl, romero, ruibarbo, limonaria, cidrón, morón, valeriana, altamisa, rosa roja y blanca, manzanilla dulce, mejorana, poleo, paico y uchuva.