Luz Amparo Reyes es una pamplonesa que después de 25 años de estar en tierras lejanas regresó para revivir su pasado, una de las mejores etapas de su vida, la misma que pasó al lado de sus padres José Reyes y Dora de Reyes y siete hermanos.

Ella evoca con alegría la sensación de percibir el olor de la molienda de caña en la finca de los progenitores. Este es uno de los mejores recuerdos que tiene de la tierra que la vio nacer hace 56 años.

Luz Amparo narró que su vida dio un giro desde que le detectaron un cáncer en la sangre. De Estados Unidos, en donde reside, hace 10 años se aprestaba a hacer un viaje de descanso a Chile. Se sentía agotada y le recomendaron que antes de partir visitara al médico.

“Me detectaron leucemia. Fui desahuciada. Estuve en cuidados intensivos y me salvé de milagro”, dijo la pamplonesa. “La  enfermedad la adquirí por el exceso de trabajo, los compromisos propios del hogar, las presiones financieras, los viajes y la separación matrimonial”.

Al término de un año se recuperó totalmente y los especialistas dijeron que ayudó la actitud positiva, la fe y tranquilidad con que asumió una nueva oportunidad de vida.

Después de superada la enfermedad, siguió estudiando y haciendo cursos de entrenamiento motivacional en Alemania.

“Presenté el diario escrito que plasmaba la crisis matrimonial que estaba viviendo y uní un poco lo de mi leucemia”, sostuvo.

Dijo que fue allí en donde le dijeron que eso no era un diario, sino un libro que tenía que publicar. Fue así como se dio a la tarea de imprimirlo y lo título: Cómo superar un triple salto mortal, sin morir en el intento.

Hoy, presentará en el auditorio de la Universidad Abierta y a Distancia (Unad), el libro.

“El pensamiento positivo define el estado de salud del cuerpo humano”, afirmó Luz Amparo Reyes, quien después una operación de médula, superar el cáncer y la ruptura matrimonial, logra reponerse, siendo hoy una mujer feliz en compañía de su hijo Giovanni Bagioli.

Datos

A los 15 años Luz Amparo Reyes se gradúo en el Colegio Nuestra Señora del Rosario. En Bucaramanga estudio ingeniería industrial en la UIS e inglés en Estados Unidos.

Después trabajó en Cúcuta, Bucaramanga y Bogotá. Se radicó un tiempo en Chile y de ahí pasó a vivir en el país del norte, donde actualmente reside.