Los cuadros oficiales de los sacerdotes, Jesús Emilio Jaramillo Monsalve y de Pedro María Ramírez Ramos, que serán presentados para la beatificación por parte del Papa Francisco el próximo 8 de septiembre en Villavicencio, son pintados en Pamplona

Jaramillo Monsalve, quien era el Obispo de Arauca,  fue asesinado el 2 de octubre de 1989 por la guerrilla del Eln, cuando se encontraba en zona rural de Arauquita.

Por su parte, Ramírez Ramos,  llamado el ‘mártir de Armero’, murió asesinado en esa población del  Tolima el 10 de abril de 1948.

El sacerdote fue víctima de una turba o revuelta que se originó en esa región, después de la muerte del caudillo, Jorge Eliecer Gaitán.

El Papa Francisco aprobó el decreto en donde se reconoce el "martirio" de los dos sacerdotes colombianos, Jesús Emilio Jaramillo Monsalve y Pedro María Ramírez Ramos.

El hecho se produjo en la Prefectura de la Congregación para la Causa de los Santos, a cargo del cardenal Angelo Amato, reconociendo el "martirio" por "odio a la fe". 

La obras

Con la llegada del pontífice de la Iglesia Católica, Papa Francisco, Pamplona se suma a este acontecimiento con la entrega de los lienzos al óleo que serán bendecidos.

Cada uno tiene dos metros de alto por uno veinte de ancho, medidas que exige la Santa Sede para este tipo de trabajos.

La presentación de la primera obra con la imagen del que fuera el Obispo de Arauca, la hizo el Arzobispo de Nueva Pamplona, Luis Madrid Merlano, quien dijo que el acto litúrgico, en donde los dos “mártires” terrenales serán elevados a los altares, se cumplirá en Villavicencio.

Sobre el por qué escogieron a un pamplonés para que hiciera los cuadros, afirmó que él sugirió en la Conferencia Episcopal que aquí había un muy buen retratista que podía pintarlos.

“Los obispos se entusiasmaron y aprobaron que se hicieran en Pamplona. Nos da mucha alegría que nosotros podamos participar a través del maestro Víctor Maldonado Villamizar”, afirmó.

El cuadro del sacerdote de Armero, no está todavía terminado por lo que en esta oportunidad, no se pudo presentar a los medios de comunicación regionales.

Madrid Merlano, recordó que él Obispo tuvo la oportunidad de venir varias veces a Pamplona, ya que aquí estudiaban seminaristas de Arauca. 

“Me emociono mucho cuando hablo de él, porque lo conocí. Me dolió mucho su muerte. Para mí es muy importante que Pamplona aporte estos cuadros”, dijo el Arzobispo con voz entrecortada y con los ojos enjugados en lágrimas.  

También la Iglesia de Pamplona aportará dos relicarios antiguos en donde se van a colocar fragmentos de huesos de los beatos para ponerlos a la veneración y que serán utilizados en el acto litúrgico.  

Uno es de plata y el otro de bronce, proceden del siglo XVIII y XIV y hacen parte de la colección del Museo Arquidiocesano.

Las dos las trasladarán a Roma, en donde una se quedará allá y la otra retornará a Colombia y reposará en la Diócesis de Arauca.