Un emotivo acto religioso católico se cumplió en Pamplona, con los bautizos y primeras comuniones de 200 soldados del Batallón García Rovira.

La primera ceremonia se hizo en la capilla María Reina de la Paz del batallón. El sacerdote Fredy Lizcano, en la pila bautismal, con una jarra de aluminio vació el contenido de agua en la cabeza de los 20 bautizados.

A la par un grupo de 180 soldados que se encuentran en el batallón García Rovira en la fase de instrucción, se desplazaron a la Catedral Santa Clara a recibir la primera comunión y la confirmación.

En la ceremonia presidida por el obispo auxiliar de Pamplona, Jaime Abril, los soldados hicieron fila para comulgar por primera vez.

El soldado cucuteño Ender Botia, de 18 años, adscrito al Grupo Maza, dijo que no había tenido la oportunidad de hacer la primera comunión y que antes era poco creyente de la fe católica.

El comandante del Batallón García Rovira, Wilson Rojas Meneses, quien se hizo presente en las ceremonias, explicó que para el Ejército es indispensable que sus soldados tengan conocimiento de la fe cristiana, independientemente del tipo de religión que profesen.