La falta de mantenimiento y los fuertes aguaceros de las últimas semanas empezaron a dejar consecuencias en la infraestructura educativa de Ocaña.

El fin de semana se desplomó un techo en la institución educativa José Eusebio Caro. Afortunadamente, el hecho se produjo cuando los menores no estaban recibiendo las clases.

Los papás de los estudiantes manifestaron que a la par de las lluvias, al colegio no se le han hecho intervenciones, y eso pone en peligro a los estudiantes.

“Irónicamente, cuando se celebra el bicentenario del natalicio de Caro, se cae a pedazos la antigua casona donde se meció la cuna del insigne poeta ocañero”, argumentaron algunos padres.

El rector de la institución, José Augusto Quintero Meneses, estuvo ayer en Cúcuta dando a conocer la situación en la Secretaría de Educación y gestionando los recursos para ejecutar obras de recuperación de toda la cubierta.

El directivo docente fue avisado por el celador de turno de que la estructura del aula 209 del segundo piso de la sede central se había caído en la noche.

“No había alumnos, pero preocupa el estado del resto de la cubierta, pues es obsoleta. Me cuentan que hace cinco años se hizo una intervención en el techo, pero hay debilidades”, agregó el académico Quintero.

Ayuda inmediata 

El rector Quintero notificó a la Gobernación y a la Alcaldía de Ocaña para que asignen a funcionarios y técnicos que evalúen los daños.

“Se debe revisar la teja y la cañabrava, no solamente en el colegio sino en las sedes anexas”, agregó.

“Nosotros con los escasos recursos hacemos labores de mitigación, mejoramiento y embellecimiento, pero en una afectación mayor como la presentada actualmente se requiere del apoyo de la Gobernación y la Alcaldía de Ocaña”, agregó.