En mujer dragón se convierte en sus ratos libres Jessica Naydú Durán Gutiérrez. Esta estudiante del quinto semestre de comunicación social de la Ufps, seccional Ocaña, asombra a cualquier peatón y conductor de las calles ocañeras.

La pasión por el teatro la hizo que aprendiera el arte del malabarismo y a botar fuego por la boca. Cambió las pasarelas por las tablas, pues desde niña participó, por iniciativa de su madre, en los concursos de belleza.

Pero, como ella misma dice su amor por el arte pudo más que los concursos. “La gente dice que tengo un rostro hermoso, y recomiendan que incursione en ese mundo, pero lo importante para mí no es lo físico sino lo que se lleva por dentro”, dijo.

Desde niña comenzó a mostrar sus dotes en las artes dramáticas y participaba en centros literarios organizados por los profesores de español para descubrir las manifestaciones artísticas.

Se monta en los zancos con gran facilidad desde que estaba en séptimo grado y ha sobresalido en obras de teatro escenificadas en el municipio, donde todos la reconocen como la mujer dragón.

“Para botar fuego el profesor Luis Guerrero me enseñó primero con agua y me ilustró luego en el manejo del combustible”, agrega.

Su anhelo es convertirse en comunicadora social, y luego estudiar artes dramáticas.

Tragando fuego financia sus estudios.