Estudiantes y papás se tomaron el colegio Edmundo Velásquez, del corregimiento de Otaré, para protestar porque no tienen transporte escolar para sus niños y llevan 15 días esperándolo.

Dayling Bacca Casadiegos, representante estudiantil, quien vive en la vereda Pueblo Viejo, dijo que ha tenido que emprender largas caminatas para poder llegar a estudiar.

Por esto, los papás han tenido que montar hasta cuatro niños en una moto, con el riesgo de algún accidente, para evitar  ausencias en las clases.

Esta situación ha venido afectando a los niños de las veredas Tierra Azul, El Páramo, El Carpintero, El Salobrito, Pueblo Viejo, Corralitos y El Limonar.

(Los padres de los estudiantes no permitirán que las clases continuen con normalidad hasta que no les den prontas soluciones.)

Carlos Julio Gómez Torrado, papá de un estudiante relató que no es justo someter a sus hijos a ese calvario para llegar a la escuela. “Somos campesinos de bajos recursos y no tenemos como pagar un vehículo, por eso reclamamos este derecho”.

Los estudiantes manifestaron que hacen su mayor esfuerzo por ir a estudiar pero “siempre algo se presenta con el transporte, los maestros o la alimentación escolar”. 

Los maestros quedaron sorprendidos de ver que los padres no permitirán iniciar clases hasta que les cumplan con el servicio de transporte prometido. 

El defensor del pueblo, Albeiro Acosta, dijo conocer que desde comienzos de enero se les ofició a los alcaldes cumplir con el proceso de contratación para evitar esa situación.

Por ello, el rector del colegio, José María Lanzziano Madariaga, espera que la secretaría de Educación dé celeridad al proceso para evitar atrasos en el calendario escolar.

“Son 140 estudiantes, 127 de secundaria y 13 de primaria, que requieren del servicio de transporte escolar”. Ante esa situación, la secretaria, Érika Martínez, dijo que el convenio debe surtir efectos jurídicos. “La licitación está en camino y se deben cumplir una serie de exigencias”, recalcó

Además, la Alcaldía     adelanta trámites para reubicar el colegio Edmundo Velásquez  debido a que el Comité de Justicia Transicional lo exige por por el hecho de estar frente a la estación de Policía. 

Los concejales han hablado con la alcaldesa, Miriam Prado, sobre un predio disponible avaluado en 163 millones de pesos para hacer la sede que se necesita para garantizar la seguridad de toda los estudiantes de la zona rural.

El dueño de este predio, médico cardiólogo Jorge Lemus Lanzziano, está dispuesto a venderlo en 100 millones de pesos con el propósito de aportar positivamente a la educación de la región.