En Ocaña 200 familias se están beneficiando con el dulce negocio de la apicultura, que hace parte de las alianzas productivas que promueve la Asociación de Campesinos de la Provincia de Ocaña, la Alcaldía y la fundación Crediservir.

En las fincas se han instalado colmenas y a los campesinos se les brinda educación financiera y asesoría técnica para que puedan poner en marcha los proyectos.

De acuerdo con Goodwin Reyes Pérez, coordinador operativo de Crediservir, a cada familia se le ha entregado una colmena y quienes han avanzado más con el proyecto han generado una productividad del doble de lo esperado.

“Con las abejas generan ingresos adicionales y lo que invierten es poco. La miel que producen es de alta calidad, al tiempo que se aporta a la conservación de los ambientes naturales y a la polinización”, dijo Reyes Pérez.

Para la habilitación de las colmenas no se han requerido vastas extensiones de tierra. Las colmenas pueden instalarse en un espacio alejado de la finca y allí las abejas trabajan silenciosamente. El proyecto inició con 108 familias y van 200.