Los pimpineros de Cúcuta se mostraron expectantes ante el anuncio del alcalde Donamaris Ramírez de hacer tres estaciones de servicio de gasolina para que las administren las asociaciones de gasolineros informales.

Según Ramírez, el presidente Juan Manuel Santos le hizo guiño a la propuesta de crear nuevas bombas, con las que se busca formalizar el gremio gasolinero y no dejar desamparadas a cientos de familias que viven de ese negocio informal.

Según los últimos censos de la alcaldía de Cúcuta, la cifra de pimpineros registrados sobrepasa los 3 mil vendedores.

“Como sabemos que no todos caben en estas bombas de servicio de gasolina, las utilidades serán para que las cooperativas hagan inversiones en microempresas y famiempresas para los demás pimpineros ”, dijo el mandatario.

Actualmente, el alcalde espera las directrices que entreguen los ministros de Minas y Energía y Hacienda para que pueda concretarse la propuesta que, según la administración local, debe ser de inmediato cumplimiento.

Según el presidente del Sindicato de Trabajadores de Gasolina (Sintragasolina), José Abel Correa, la noticia es buena, aunque todavía hay cierto recelo entre los pimpineros, pues no saben quién las manejará.

“Estamos de acuerdo con que se debe acabar el contrabando y que la gente debe entrar a la normalidad, pero el Gobierno también tiene que pensar que aquí se debe implementar industria y empresa para que un plan de reconversión laboral pueda funcionar”, indicó.

Los pimpineros de Sintragasolina sienten desconfiaza y temen que las nuevas estaciones caigan en manos equivocadas y por eso la dirigencia de Sintragasolina pidió que las ayudas beneficien directamente a los pequeños vendedores.

“Si son estaciones de servicio lo que ofrece el gobierno, pues que no solo sean tres, sino que sean muchas porque aquí habemos más de 6 mil familias que vivimos del negocio en las calles”, dijo Correa