Tras la polémica que se desató por el cruce de versiones respecto del siniestro que dejó 16 miembros de la Policía sin vida, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, aseguró, en primer lugar, que la información que se dio sobre que el patrullero Juan Carlos Meza Patiño que fue trasladado al Hospital Simón Bolívar, con un impacto de arma de fuego: no es cierta.

Afirmó que al ingreso a la clínica se dijo que era probable que el uniformado hubiera sido impactado con una bala en una de sus piernas, pero luego de realizar los correspondientes exámenes, la clínica descartó esa hipótesis y aseguró que al contrario mostraron que era evidente que no había rastros de un ataque de ese tipo.

En segundo lugar, y frente a la versión de un hombre que dice que su hija menor de edad habría sido afectada por las esquirlas del helicóptero siniestrado, el ministro señaló que después de realizar las investigaciones se había comprobado que no era posible que las esquirlas hubieran llegado hasta el sitio en que estaba la menor.

Afirmó que el hecho que la afectó sucedió a más de 4 kilómetro en línea recta, de donde cayó la aeronave y que en una zona topográfica como esa es muy difícil que eso haya ocurrido. “Por lo que es altamente improbable que las heridas fueran causadas por el siniestro”, señaló.

Añadió que sin embargo, unidades de la Policía y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar están acompañando al hombre y a su hija, y añadió que el padre tampoco fue detenido como se había indicado, y que ahora se estudian las lesiones de la niña ya que según parece, habrían sido provocadas por un golpe con una piedra.

De otra parte, indicó que los 16 cadáveres de los policías que fallecieron en el siniestro de este martes en Urabá ya fueron retirados del lugar del accidente y están siendo trasladados a Bogotá, aunque se encuentran en pésimas condiciones.

“Me da tristeza decir que dos de esos cadáveres son fácilmente identificables el resto quedaron irreconocibles y por ello serán sometidos a pruebas dentales y ADN”, dijo Villegas.

En la capital se hará el proceso de identificación y posteriormente se trasladarán a las ciudades de donde eran oriundos para llevar a cabo las honras fúnebres.

Finalmente, pese a las controversias que ha habido sobre las causas de este suceso, el jefe de la cartera de Defensa aseguró que se mantiene la hipótesis de que fue un choque “tremendamente destructivo” del BlackHawk contra la ladera donde estaban desarrollándose las operaciones por la falta de maniobrabilidad a causa del mal tiempo.