La obra, unas de las más olvidadas, luego de ser construida en la década de los 90, será dada al servicio.

Según el alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez Lobo, la inversión fue de $15.000 millones.

Para el mandatario local, los cucuteños podrán estar felices por tener una vía de las características que ahora tiene la Panamericana: nuevas cajas, una capa de asfalto nueva y un sistema de drenaje.

Según la administración se trata de un proyecto añorado, dado a que es la entrada y salida de la ciudad hacia Maracaibo y Mérida.

“Una vez se habilite la vía Panamericana, serán 4 kilómetros asfaltados en los carriles de ida y venida, desde la glorieta del Aeropuerto hasta la glorieta de El Salado, en los que previamente, se hicieron los trabajos de recuperación de tuberías y alcantarillado”, informó la administración.

Cabe indicar que para mitigar riesgos, en los diseños se añadieron dos muros de contención, uno de 40 metros de largo por 3 de alto y otro de 70 metros de largo por 3 de alto.

Según el alcalde, $5 mil millones de los recursos invertidos en la vía fueron propios de Cúcuta, los cuales se utilizaron para la construcción del canal colector de aguas en una extensión de dos kilómetros.

La nueva vía Panamericana cuenta con 120 rejillas y 80 sumideros, además de una capa asfáltica diseñada para tráfico pesado, junto con amplios andenes, que le dan características especiales a la obra, dijo Ramírez.
 

La mala imagen

A pesar de que la inversión fue importante y esto mejoró notablemente el tráfico, existe el problema de invasión sobre la vía Panamericana.

Óscar Genaro García, residente del sector, dijo que el separador fue mal utilizado por comerciantes quienes lo llenaron de avisos.

En los avisos se ofrece todo tipo de servicios como latonería,  venta de gasolina, mantenimiento de mecánica, entre otros, dando mala imagen.