La oleada de violencia que hoy tiene bajo el pánico al corregimiento Aguas Claras de Ocaña fue anunciada por la Defensoría del Pueblo desde el pasado 4 de agosto, en una circular de alerta temprana que se encuentra en manos de las autoridades policiales, militares y civiles.

A pesar de eso, la noche del jueves, fueron asesinadas tres personas en un establecimiento de este sector que hace parte de la comuna 5 de Ocaña.

Pese a las advertencias y las recomendaciones dirigidas a las autoridades por parte de la Defensoría del Pueblo, a la fecha, el desarrollo de esta confrontación, ha dejado en la región un elevado registro de víctimas.

El defensor del Pueblo de Ocaña, Diógenes Quintero, señaló que era lamentable que esta situación no se hubiese podido evitar.

La pasada masacre, en agosto, ocurrió en el corregimiento de Capitán Largo de Ábrego, donde murieron otros tres hombres. 

La masacre

El trágico hecho se presentó el jueves, hacia las 9:30 p.m., cuando Saúl García Cárdenas, 30 años, Haider José Santiago Ortega, de 29, y Elmer Ortega Quintero, de 31, estaban  reunidos en un establecimiento de Aguas Claras y llegaron un par de hombres armados y comenzaron a dispararles.

Aunque las víctimas intentaron correr para salvarse, los pistoleros los alcanzaron y remataron.

La primera hipótesis que manejan las autoridades judiciales es que el Eln sería el responsable de la masacre y que todo se habría dado por una situación de un dinero. Sin embargo, los resultados de la investigación dirán la verdadera razón del lamentable suceso.

Se conoció que dos de los tres hombres residían en el barrio San Cristóbal, de Río de Oro, sur del departamento del Cesar.

Los familiares de las víctimas evitaron  hablar sobre lo sucedido y solo esperan que las autoridades procedan a esclarecer los hechos.

El establecimiento donde se presentó el caso fue cerrado en días pasados por incumplir con los protocolos de bioseguridad. 

Las reacciones 

La masacre provocó que ayer en la mañana se llevara a cabo un consejo de seguridad extraordinario. Samir Fernando Casadiego, alcalde de Ocaña, tomó la vocería y solicitó a las autoridades cumplir con las tareas encomendadas por el Ministro de Defensa durante la más reciente visita.  

“Rechazar enérgicamente esa situación que atenta contra la tranquilidad de Ocaña, nos genera zozobra y hacemos un llamado al Gobierno Nacional en el acompañamiento en estas situaciones que se salen de las manos. El 26 de agosto durante el consejo de seguridad, presidido por el ministro de Defensa, solicité la presencia permanente del Ejército en el sector de Aguas Claras, porque se habían venido presentando situaciones en esa área rural de Ocaña”, sostuvo el mandatario.

El personero de Ocaña, Óscar Eladio Galvis Tarazona espera resultados contundentes por parte de las autoridades judiciales. 

“Hasta el momento no se han establecido los móviles y autores de los hechos, solo existe hipótesis relacionadas con posibles negocios de estupefacientes, pero son versiones preliminares”, recalcó.