La reactivación en Cúcuta va avanzando de manera progresiva. Diferentes sectores económicos y sociales ya están reabriendo y la ciudadanía se está adaptando a esta nueva normalidad marcada por la pandemia.

Las iglesias, por ejemplo, comenzaron a retomar las actividades religiosas con estrictos protocolos de bioseguridad.

Si bien es cierto, el plan piloto que permite que las iglesias abran sus templos con un aforo máximo del 35 por ciento, ya fue aprobado en el país y algunas iglesias ya lo están ejecutando desde hace dos semanas. Pero, es de precisar que esto fue permitido solo en municipios del país con bajos contagios o NO COVID.

En el caso de Cúcuta, no se pudo implementar en lapso de su aprobación, dado que fue considerada una ciudad de alto impacto por contagios de la COVID-19.

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A pesar de esto, gran parte de las iglesias tanto católicas como cristianas protestantes de la ciudad establecieron protocolos de bioseguridad para que, en el momento oportuno, se pudiera recibir a los feligreses en los diferentes templos.

Pero por ejemplo, a la Catedral San José de Cúcuta, luego de estar cerrada más de cinco meses por el coronavirus, volvieron los fieles con tapabocas, en un aforo aforo máximo de 50 personas incluyendo el sacerdote y sus ayudantes, y guardando el distanciamiento físico.

Además, se espera que después del 15 de septiembre, se pueda dar inicio a la aplicación del plan piloto en los demás templos de la ciudad y el área metropolitana, en donde se permite que, según el espacio de cada lugar donde se desarrollan celebraciones eucarísticas, cumplan con un aforo reducido.

La Secretaría de Gobierno municipal, mencionó que las iglesias deben cumplir con todas las medidas de bioseguridad, al igual que cualquier empresa, todas aquellas que ya hicieron la inscripción e implementación pueden abrir sus puertas, y no necesitarán de una visita o autorización previa por parte de la administración municipal. 

Sin embargo, desde la Alcaldía de Cúcuta, se precisó que estarán llevando a cabo jornadas de inspección a los distintos sectores que iniciaron labores desde el primero de septiembre (incluyendo las iglesias), en caso de que no cumplan con los protocolos estos serán cerrados.

Por tal razón y para evitar sanciones, es de suma importancia que los líderes religiosos registren sus iglesias en la página de la Alcaldía para que la apertura se dé manera formal y la autoridad pueda dirigirse al lugar cuando se precise.

Listos para abrir los templos

La Iglesia católica implementó protocolos para antes, durante y después de la celebración eclesiástica, entre estas medidas se destacan la desinfección general del lugar, inscripción y toma de temperatura de los feligreses al momento de ingresar a la parroquia y separación superior a dos metros durante la celebración.

Monseñor Víctor Manuel Ochoa, obispo de Cúcuta afirmó que casi todas las parroquias de la ciudad están listas para abrir sus puertas a los católicos de la capital nortesantandereana.

“Desde hace tres meses se viene trabajando en la implementación de los protocolos y se fueron adelantando talleres con los sacerdotes de las iglesias para instruirlos sobre las nuevas medidas de bioseguridad”, afirmó.

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Por su parte, el pastor Juan Carlos Díaz, encargado de las comunicaciones del Centro Cristiano Internacional, mencionó que desde esta semana se están llevando a cabo diferentes reuniones en el auditorio principal de la iglesia, en donde el número límite de personas en el recinto es de 50 y donde todos pasan por un proceso de desinfección y permanecen bajo un distanciamiento mínimo de dos metros.

El pastor explicó que inicialmente esta semana las reuniones se desarrollarán con líderes religiosos del Centro Cristiano, en donde se les explicarán todos los pasos a seguir y los protocolos que se deberán implementar en los templos de la ciudad y el área metropolitana.

“Queremos que la apertura se dé de la manera correcta, por eso con los pastores y líderes se están desarrollando capacitaciones para que ellos repliquen estos protocolos en las 67 iglesias que hacen parte de nuestra congregación en el área metropolitana”, precisó Díaz.

Además, mencionó que dentro de las acciones protocolarias está la toma de temperatura, desinfección de manos y el estricto cumplimiento del distanciamiento social de dos metros en cada asiento.

Se espera que en 15 días los templos con mayor capacidad de aforo puedan retornar sus labores con más cantidad de feligreses en las celebraciones dominicales, entre otras.

  Las iglesias cristianas también están listas para abrir sus puertas, implementando los protocolos de bioseguridad.