Diversas han sido las reacciones generadas por el llamado a clases para iniciar el nuevo año escolar en Venezuela el venidero mes de septiembre bajo el esquema de 7x7, que hiciera el presidente Nicolás Maduro. 

Lo anterior implica que los alumnos deberán acudir una semana a clases presenciales y otra semana cumplir con sus tareas educativas de manera virtual.

En Táchira, mientras la Zona Educativa regional desplegaba un documento en línea para aplicar una encuesta que permitiera conocer tanto la disposición del personal a volver a las aulas como su acceso a herramientas que permitan la formación en línea, padres y maestros rechazaron el llamado presidencial.

“Siento temor de enviar a mis hijos al colegio, pues cada día son más los casos positivos y no hay evidencia de que la situación comience a mejorar en el país”, dijo Daysy Moncada, madre de dos estudiantes de preescolar y primaria respectivamente, quien calificó de “traumática” la experiencia de la educación virtual al cierre del año escolar 2019-2020.

“Yo además de mi trabajo tenía que hacer de maestra, enviar video a la Zona Educativa y quedarme con ellos hasta tarde haciendo tareas, porque aquí cuando no es que se va la luz, entonces es que no hay internet”, explicó Moncada. 

Para Ildemaro Useche, presidente de la seccional Táchira de la Federación Venezolana Maestros (FVM), el problema del riesgo por la pandemia se suma a las múltiples dificultades que enfrenta el magisterio venezolano para cumplir con la labor educativa. 

Destacó que la queja reiterada de los maestros es el exiguo sueldo que perciben, el cual no supera los 5 dólares mensuales.

“Si el patrono no cumple con las exigencias del maestro sobre una oferta salarial digna, instalaciones educativas adecuadas, atención en salud que permita un resguardo al docente y a su familia, acceso confiable a servicios básicos como luz, agua e internet (...) no será posible iniciar las clases en ninguna de las 2 modalidades”, mencionó Useche. 

Evencio Zenón, coordinador regional de la Coalición Sindical, dijo que en Venezuela no existen condiciones sanitarias ni de infraestructura para iniciar el año escolar 2020-2021. Propone que las clases se inicien en enero, y que los tres meses restantes de este año, sirvan para hacer un repaso y cumplir los objetivos que no fueron logrados en el año.