El aumento de delincuencia a causa de la oscuridad que ahora predomina en ciertos sectores del barrio Guaimaral, fue paradójicamente provocada por delincuentes que robaron lámparas y cableado del alumbrado público del sector.

Paulo Becerra, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio, comentó que debido al cambio de lámparas que se registró en los escenarios deportivos del sector, el alumbrado público faltó por unos días, sin embargo, a petición de la JAC fue restablecido con prontitud, pero la problemática no finalizó.

Según explicó el comunal, en zonas aledañas también el alumbrado empezó a fallar afectando directamente a la avenida 11 entre calles 13 y 14, la avenida 8 con calle 18 y que es contigua al canal Bogotá.

Pero, en esta ocasión el problema no radicó en un cambio de lámparas, sino que su principal causa fue la delincuencia que se está presentando en el barrio pues habitantes de calle y ladrones estarían hurtando el cableado y luces del alumbrado público para luego venderlo por chatarra.

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Esto, a su vez, agudiza la preocupación de los habitantes de la zona, quienes señalan que la oscuridad evidentemente aumenta el riesgo de robos y atracos a los habitantes que viven en la zona.

Becerra precisó que junto al CAI del sector, se han emprendido actividades de vigilancia pero no han sido suficientes para garantizar la seguridad, por lo que se precisan de políticas más rígidas y acciones más contundentes desde la administración municipal para combatir la delincuencia.

La Opinión intentó comunicarse con la Secretaría de Seguridad Ciudadana municipal para conocer los planes de prevención y seguridad en los distintos barrios de la ciudad, ya esta problemática ha venido en aumento en diferentes zonas de Cúcuta.

Hasta el cierre de esta edición no fue posible hacer contacto con la entidad.