En Pamplona cada día que pasa aumenta la tensión por el incremento de las cifras de personas contagiadas con la COVID-19, pasando en los últimos días a más de 30 confirmados, cuando los datos estaban en menos de diez positivos en semanas anteriores.

Esta situación se debe al desorden imperante en la ciudad en donde muchos sectores no han querido acatar las medidas de aislamiento obligatorio, de bioseguridad, toque de queda, ley seca, pico y placa.

Las calles y establecimientos de comercio permanecen con gran afluencia de público, al igual que venta callejera de comida rápida en donde los consumidores se aglomeran en los puestos.

Todos sin lavarse las manos, agarran los tarros de las salsas y picante, sin que exista el mínimo control por parte de las autoridades sanitarias.

También en edificios, condominios y casas de habitación el común denominador son las reuniones sociales o familiares que se convierten en focos de contaminación del virus de la COVID-19.

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La directora local de Salud, Martha Maldonado, informó que al no tenerse en cuenta las medidas se corre el riesgo que en Pamplona se vuelvan a tomar nuevas disposiciones dirigidas a establecimientos comerciales que congregan cantidades de público.

También indicó que en la calle las personas andan sin las medidas de bioprotección, aislamiento y que si se sigue así no habrá autoridad, ni recursos de salud suficientes para atender o controlar las situaciones.

En los boletines informativos de salud municipal se reportaron casos relacionados con un menor de 20 meses quien presentó sintomatología respiratoria y es contacto estrecho de un caso positivo de la COVID-19.

También hay de positivos de 22 años, 23, 26, 33, 34, 38, 43 y 56, entre otros.

En las estadísticas se tienen con la mayor cifra en poblaciones de 20 a 29 años (12 casos) y de 30 a 39 (10 casos).

En los rangos de 50 a 79 años, solo hay reporte de 4 personas que fueron reportadas como positivo para la COVID-19.