La tarde del jueves, la Policía Metropolitana de Cúcuta fue alertada del hallazgo de un cadáver descompuesto, tendido en el sector La Isla del barrio El Escobal.

La víctima tenía un impacto de bala en la cabeza, no tenía camisa y llevaba puesta una sudadera negra.

Hasta el cierre de esta edición, el occiso, que no había sido identificado, tenía rastros de tortura y sus manos atadas.

Los habitantes de la zona aseguraron que no lo conocían y no entregaron mayores detalles del hecho.

Entre tanto, miembros de la funeraria Nuestra Señora del Carmen arribaron a la escena del crimen y trasladaron el cadáver al Instituto de Medicina Legal, a la espera de que los familiares lo reconozcan y reclamen.

Los investigadores judiciales obtuvieron poca información que les permita avanzar en las pesquisas de los móviles del crimen y de los posibles autores del hecho. Sin embargo, inicialmente aseguraron que el homicidio ocurrió en suelo venezolano.