Una familiar de Darío Quiñones Villamizar, alias Marcial, quien murió en una operación del Ejército en Chitagá (señalado de ser el tercer cabecilla del frente Efraín Pabón Pabón del Eln) le pidió a los organismos de derechos humanos que agilicen la entrega del cadáver de su ser querido, para darle el último adiós.

“Ya completamos nueve días en trámites que pide la Fiscalía y no nos quieren entregar el cadáver. Ahora nos enviaron una carta diciendo que dentro de 10 días nos responden si lo entregan o no”, se quejó la mujer.

La doliente aseguró que los papás de Quiñones murieron hace más de 30 años, por lo que ella es la única que lo puede reclamar.

“Un primo hermano de él ya tiene 90 años y es muy complicado”, dijo ella.

La muerte

Marcial, de 49 años, tendría 33 al servicio del Eln.

Según las autoridades, en su prontuario figura que participó en la toma guerrillera al municipio de Guaca (Santander) en 1997, en la que murieron 7 policías, 13 quedaron heridos y varios civiles resultaron afectados.

Además, estuvo en las tomas de Silos, Chitagá y Cácota, en las que murieron 5 policías.

“A Marcial le gustaba quedarse en diferentes casas de los habitantes de la zona donde delinquía. También tomaba licor constantemente”, dijo una fuente judicial.

Según la fuente, una reunión convocó a dos comisiones de este frente, con la intención de planificar extorsiones y secuestros para reforzar las finanzas del Eln, cuando fueron sorprendidos por las autoridades.