La pregunta:

¿Cómo ha visto los efectos del COVID-19 en Norte Santander y cree que se le está controlando?

Respondieron:

César Tulio García, presidente de la Asociación Sindical de Institutores de Norte Santander.

Los patrones geográficos, económicos y de migración que vive Cúcuta, en esta crisis por pandemia del coronavirus ha permitido generar respuesta humanitaria solidaria educativa. Las instituciones educativas, con estudiantes residentes en Venezuela se les ha vinculado al proceso de aprendizaje desde sus casas con la entrega de material educativo.

A pesar de la “incidencia baja del virus”, se agudizó la crisis económica regional, se develan aún más las situaciones de desigualdad, el aumento del nivel de desempleo y pobreza, más y el olvido estatal del sector salud. También se agudiza el descontento de la población más vulnerable por cuanto un alto porcentaje que sobrevive del día a día se encuentra confinado en sus casas y no puede proveer a sus familias del sustento diario.

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 Gustavo Adolfo Rodríguez Barrera, presidente de la Colegiatura de Abogados de Norte Santander.

 Los efectos del COVID-19 son devastadores y ha desnudado o visibilizado aspectos que no hubiésemos observado de no haber ocurrido. Para el interés del gremio que represento, se   evidenció que muchos de los preceptos del CGP no han sido implementados por la rama judicial. Conceptos como la digitalización de expedientes, demandas, pruebas, notificaciones,   contestaciones, nulidades, autos y sentencias de los jueces, y la realización de audiencias virtuales, no se han hecho realidad. Todo lo anterior aunado a la suspensión de términos   judiciales.

 Adán Muñoz, presidente del Colegio Médico de Norte Santander.

 Indudablemente, los efectos del Covid-19 son críticos y preocupantes para todos en el departamento. El sector de la salud se vio obligado a tomar medidas inmediatas y necesarias, para   lo cual no tenían adecuadas condiciones administrativas, financieras ni asistenciales.  Además de los efectos desde el punto de vista emocional de la población. De otra parte,   es difícil precisar si se está controlando la enfermedad, pues considero que no existen datos objetivos y reales.  Con los datos publicados a la fecha, la lectura es de alta letalidad, casi un   10 por ciento. No se conoce realmente la población portadora del virus y pareciera que no está controlada.

 Rafael Villamizar Ríos, miembro del Comité Ejecutivo de la Confederación e Abogados de Colombia.

 Los efectos son multidimensionales. Han impactado negativamente nuestra economía y la vida social. Pero, también, es la gran oportunidad para dar el salto al mundo virtual.  No todo volverá a ser como antes. Se requieren medidas muy ágiles para reactivar el sector productivo.  La Administración de Justicia es uno de los motores de nuestra economía, haciéndose necesario la implementación de los medios tecnológicos previstos en el Código General del Proceso, para tener una pronta y eficaz administración de justicia.

 La pandemia no ha superado el mínimo previsto, gracias a la disciplina impuesta, pero, si se desborda, la catástrofe sanitaria será inimaginable.

 Capitolio de Colombia, sede del Congreso.

 La reunión presencial del Congreso de Colombia quedó excluida por el tiempo de la cuarentena a que obliga la pandemia del COVID-19. Así lo dispuso una proposición   aprobada en la Cámara de Representantes el pasado jueves por iniciativa del Centro Democrático. Voceros de la oposición advirtieron que se corre el riesgo de anular el control   político al Gobierno, que es un paso a la dictadura al dejar el manejo de la nación en manos hegemónicas del Ejecutivo o el Presidente de la República, según se interpretó.

 Hoy y mañana, en el horario de 8:00 a 8:30 de la noche, en el programa La Palabra del canal ATN, el entrevistado será el abogado Rafael Humberto Villamizar Ríos, miembro   del comité ejecutivo la Confederación de Abogados de Colombia.