Después de 13 días de una mortal riña ocurrida en una discoteca en Ocaña, en las últimas horas fueron capturados los hombres responsables del hecho que dejó un muerto y nueve heridos.

El coronel Jesús Manuel de los Reyes Valencia, comandante encargado del Departamento de Policía Norte de Santander (Denor), informó que los tres detenidos son cabecillas de Los Pelusos, reducto del Ejército Popular de Liberación (Epl).

Destacó que, en una operación sorpresa en el parque principal y en un billar en el barrio Cristo Rey de Ocaña, integrantes de la Seccional de Investigación Criminal e Inteligencia Policial lograron el arresto por orden judicial de estos delincuentes.

Los sindicados fueron identificados como Luis Alfonso León García, conocido como ‘Tito’, de 23 años y natural de Hacarí; Deiver Alfonso Barbosa Barbosa, ‘Chato’, de 20 años y también oriundo de Hacarí; y de Cristo Humberto Ascanio Vacca, apodado ‘Catoa’, de 25 años y nacido en La Playa de Belén.

Durante la operación ‘Hitomaru’ fue incautada una pistola Prieto Beretta, con 14 cartuchos para la misma.

El coronel agregó que los capturados enfrentan cargos por homicidio agravado, homicidio agravado tentado concurso homogéneo, fabricación, tráfico y porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.

Los perfiles

‘Tito’ es el cabecilla urbano de Los Pelusos en Ocaña y estaba encargado de ordenar y coordinar la ejecución de homicidios y extorsiones a comerciantes, finqueros y transportadores, a través de la distribución de panfletos intimidatorios. 

Además, se encargaba del reclutamiento de jóvenes para fortalecer las estructuras del grupo criminal en el departamento.

‘Chato’ es el cabecilla logístico de las comisiones urbanas de Los Pelusos que delinquen en Ocaña, Ábrego y La Playa.

‘Catoa’ es el segundo al mando de Los Pelusos en Ocaña y era quien ordenaba y coordinaba la compra y venta de pasta de coca en el Catatumbo. De Igual forma financiaba la organización para la compra de víveres dirigida a los campamentos.

Los detenidos y el arma de fuego se encuentran a disposición de la Fiscalía General de la Nación y a la espera de la audiencia pública de legalización de captura y posteriormente la imputación de cargos.

La pelea mortal

Según las investigaciones, durante un momento de rumba y licor, se registró una pelea en una discoteca ubicada en la avenida Francisco Fernández de Contreras de Ocaña, donde presuntamente estuvieron involucrados los detenidos y unos amigos con otras personas.

Sin embargo, luego de que cerraran el establecimiento nocturno, Tito, Chato y Catoa, se fueron del lugar, mientras que una aglomeración de personas quedó sobre la avenida, disfrutando aún de algunos tragos.

Pasados algunos minutos, los tres hombres regresaron armados en motocicletas y empezaron a disparar contra las personas que estaban esperando transporte para ir a sus casas.

En el ataque fue impactado el estudiante Kevin Danilo y otras ocho personas, entre ellas, mujeres.

Los heridos fueron trasladados al hospital Emiro Quintero Cañizares, donde finalmente murió Rojas, de 26 años, natural de Becerril (Cesar).

Entre tanto, Daniela Stefany Contreras Peñaranda, de 24 años; Yeltsin Eduardo Angarita Peña, de 28; Yineth Paola Claro Rincón, de 19; Cristian Camilo Contreras Márquez, de 22; Luis Fernando Moreno Contreras, de 23; Juan Camilo Díaz Argote, de 29; Nicolás Quintero Barbosa, de 24 y Andrés Eduardo Rodríguez Zuleta, sobrevivieron, algunos de ellos, con heridas de gravedad.

Las directivas de la universidad decretaron luto por tres días, debido a la muerte del estudiante, que se caracterizó por su amabilidad, su decencia y las ganas de salir adelante.

Édgar Antonio Sánchez Ortiz, director de la institución, lamentó el hecho en ese momento y calificó como una “muestra de intolerancia”, la jornada violenta. Asimismo, se solidarizó con la familia del estudiante Rojas.