Las víctimas del conflicto armado son los nuevos encargados de potencializar las fortalezas agrícolas e industriales que tiene Arboledas.

Desde finales del año pasado, la Alcaldía y la Gobernación de Norte de Santander, con el apoyo de Innpulsa y Comfanorte, dieron inicio a un proyecto productivo que incluyó la construcción de un trapiche sostenible y la consolidación de la Cooperativa Dolce Alma.

Además del procesamiento de la caña de azúcar,  el proyecto incluyó la creación de una marca de panela pulverizada y tiene previsto el apalancamiento en los primeros tres meses en posicionamiento de la misma, comercialización y gestión de la demanda.

Las veintinueve familias beneficiarias recibieron también dotación completa en maquinaria y equipos, así como todos los trámites de registro de Invima y código de barras.

El proyecto tuvo un costo total de $767 millones, de los cuales $315 millones corresponden a un convenio entre la Gobernación de Norte de Santander y Comfanorte, y $415 millones entre Comfanorte e Innpulsa. 

Hoy se hará el lanzamiento oficial del proyecto y la inauguración del trapiche, en la Granja Municipal, predio donado por la alcaldía.

Unidos por el agro

Andrea Torrado, responsable de Gestión Social de Comfanorte, explicó que los beneficiarios del proyecto trabajaban de manera individual cultivos de caña y actividades agrícolas.

“Durante el proyecto se identificó el potencial del producto (panela) y se diseño el modelo de negocio bajo el esquema de marca social, lo que permitió afianzar conocimientos básicos de cooperativismo, buenas prácticas de manufactura y costos”, explicó.

Torrado señaló que ya se lograron alianzas comerciales con supermercados La Canasta y Los Montes, como una estrategia de consumo del producto local.

“Se espera que los ingresos mensuales de la venta de panela y otras actividades les genere sostenibilidad a las familias y una capacidad de crecimiento en el mediano plazo”, agregó.