Los representantes de los gremios, organizaciones sociales y políticas e, incluso, los ciudadanos del común, tienen hoy el espacio para expresar sus objeciones en torno al documento del Plan de Ordenamiento Territorial (POT) que hace curso en el Concejo de Cúcuta, y que servirá de carta de navegación a la ciudad para los próximos doce años.

La cita es en el teatro municipal, a partir de las ocho de la mañana, y corresponde al primero de dos cabildos populares que se tienen programado para darle la socialización adecuada y que exige la ley previo a la aprobación que se debe dar al documento en el concejo.

En la víspera del cabildo, el presidente del Concejo, Leonardo Jácome, extendió la invitación también al alcalde electo Jairo Yáñez, al igual que a los concejales que resultaron elegidos, para que también aporten sus comentarios a la discusión.

No obstante, ante la noticia que se difundió en medios locales, relacionada con la solicitud de Yáñez al alcalde César Rojas, de que suspenda el trámite de la aprobación del POT que se lleva en el Concejo, Jácome fue claro al responder que “esto no se puede dar, porque la ley no contempla la suspensión de un proyecto por parte de los concejales, pues estaríamos incurriendo en prevaricato al extralimitarnos en nuestras funciones”.

Dijo que el proyecto del POT estuvo más de un año en Corponor y además fue discutido por los gremios y representantes de la sociedad cucuteña.

“Hago un llamado al nuevo alcalde para que en el marco del cabildo que se llevará a cabo mañana (hoy) entregue los soportes de lo que él considere que  está mal, y de la misma manera se hará la discusión y análisis crítico.

Jácome insistió en que hay un proceso contractual de por medio y eso no puede ignorarse, ese trámite no puede suspenderse así por así, las cosas no son así a la ligera”.

A su turno, el concejal ponente del POT, Bachir Mirep,  también invitó de manera especial a Yáñez para que de manera precisa y objetiva señale cuáles son las inconsistencias que pueda tener el documento, para discutirlas, analizarlas y revisarlas y, si es del caso, poderlas incorporar en la discusión y presentarlas a consideración ante los organismos correspondientes.

“No tenemos afán de aprobar si de por medio hay una irregularidad o inconsistencia. Yo si creo que esto debe despolitizarse y darse una discusión técnica y precisa, como se va a dar en el cabildo”, puntualizó Mirep.