La masacre de cuatro hombres y la aparición de un descuartizado en la zona de frontera, en los alrededores de Puerto Santander, dejan entrever la frialdad y la crueldad excesiva con la que los grupos armados ilegales imponen el terror para disputarse el negocio del narcotráfico y las extorsiones por el contrabando.

En los dos recientes hechos de violencia hay una característica común: los crímenes se cometieron en Venezuela y posteriormente, los cadáveres fueron arrojados en territorio colombiano, con la intención de generar pánico entre los habitantes de esta población fronteriza.

“Hay una confrontación entre Los Pelusos y Los Rastrojos, que quieren tomar el control sobre La Fría, Boca de Grita (Venezuela) y en la zona de Puerto Santander”, aseguró el coronel José Luis Palomino López, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta.

Lea además Aparece cuerpo descuartizado en Puerto Santander

Dos costales en la madrugada

La trocha conocida como El Diamante, en Puerto Santander, que comunica con Venezuela, fue el escenario de un macabro hallazgo, cuando los campesinos y niños del sector salían a empezar su jornada, en la mañana del viernes.

Se presume que un grupo de hombres, a bordo de un vehículo, arrojó los dos costales a las 3:00 de la madrugada, con el cuerpo desmembrado de Alexis Eduardo Flórez, conocido como Chencho. Junto a los costales arrojaron la cabeza de la víctima y un papel, al parecer, con un mensaje, que la lluvia borró. Se estableció que en un costal estaba el tronco, mientras que en el otro fueron empacados los brazos y piernas.

“Un primo pasó y vio eso pero no fue capaz de acercarse, por lo que fue a despertar a un tío para que viniera a verificar si era nuestro familiar. Cuando mi tío llegó, se dio cuenta que era él y de inmediato le avisaron a la mamá”, dijo un pariente de Flórez.

Mientras en el lugar se aglomeraban familiares y curiosos para conocer lo que había ocurrido, uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta, fuertemente armados, trataban de garantizar la seguridad.

Sin embargo, cuando los asistentes observaban detenidamente el movimiento de los policías, una ráfaga de disparos que se oyó al otro lado de la frontera, alertó a los curiosos y a los agentes de la tensión que se vive en el lugar.

El macabro hallazgo ocurrió paralelamente a la visita del general Jorge Luis Vargas Valencia, comandante de Seguridad Ciudadana de la Policía, quien envió recomendaciones a los habitantes del área metropolitana de Cúcuta, para que celebren con tranquilidad el Día de Amor y Amistad.

Estaba en Venezuela

Según se conoció, Alexis Eduardo Flórez, al parecer, había sido víctima de un atentado hace algún tiempo en Puerto Santander, por lo que tuvo que refugiarse en Venezuela, donde trabajaba con el contrabando de gasolina.

“Él se fue y no venía por acá. La compañera vivía en Cúcuta y constantemente iba con sus cuatro hijos a visitarlo”, explicó una fuente judicial.

Lo único que contó la mamá de Flórez, es que desde hace al menos seis meses no tenía noticias de su hijo y no conocía su paradero.
Miembros de la Brigada Interinstitucional contra Homicidios (Brinho) practicaron la inspección y el levantamiento del cadáver descuartizado.

Por ahora, las autoridades investigan si la víctima hacía parte de un grupo armado ilegal que delinque en la frontera.

Le puede interesar Pugna de Los Pelusos que asusta a Puerto Santander

Los cuatro baleados

En la mañana del miércoles, en el corregimiento Banco de Arena, en la trocha El Infierno, fueron hallados cuatro hombres muertos que pertenecerían a Los Pelusos.

Entre los asesinados en territorio venezolano, también traídos por un grupo de desconocidos armados con fusiles y encapuchados, están Aurelio Ovalles Bautista, Jeison o Chupeta; Diógenes Balaguera Garay, a quien le dicen Ponto, así como Barbas y Monopan.

Se ha atribuido esta situación a una disputa interna entre Los Pelusos, por la pérdida del dinero de un negocio de narcotráfico.

Por ahora, las autoridades avanzan en las pesquisas para esclarecer estos hechos violentos en la frontera.