Aunque los ojos de los familiares del intendente Jaime Gustavo Vega Medina permanecen invadidos de lágrimas y en sus rostros se refleja tristeza y resignación, la valentía de esta familia está rodeada de uniformados de la Policía.

En medio de un callejón en el barrio Alfonso López de Cúcuta, está ubicada la casa materna de Vega, quien fue asesinado junto a un patrullero, la tarde del viernes, en Cumbal (Nariño), en medio de un plan pistola.

Con honores despedimos a otro de nuestros Héroes IT Jaime Gustavo Vega Medina, confiando que Dios lo tendrá en su santa gloria, paz en su tumba #DiosYPatria pic.twitter.com/U19f9Rxxnm

— CR Álvaro Javier López Pabón (@PoliciaNarino) 15 de junio de 2019

Los cadáveres de los uniformados quedaron tendidos en el piso, aún con las piernas sobre la motocicleta de la institución, recostados a un carro.

El intendente Vega, quien se pensionaría de la Policía en agosto, era el subcomandante de la estación de Cumbal. Su acompañante, el patrullero Edison Antonio Muñoz Botina, cumplía las funciones de secretario.

Casero y amable

Su hermano, quien también portó el uniforme de la Policía pero actualmente está retirado, recordó a su ser querido como un hombre amable, allegado a su familia, casero y que no se metía con nadie.

Asimismo, dijo que Jaime Gustavo Vega prestó su servicio en la institución la gran parte del tiempo en Bogotá y en los últimos dos años estuvo en Nariño, donde finalmente fue asesinado, al parecer, por integrantes del Ejército de Liberación Nacional (Eln).

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El intendente cucuteño, de 38 años, dejó dos hijos menores de edad, entre estos, una niña de 8. 

En su hoja de vida figuran 32 felicitaciones y 9 condecoraciones por su sobresaliente labor en la Policía.

Rechazo y preocupación

El secretario de Gobierno de Nariño, Mario Viteri, lamentó la muerte de los uniformados. “Desde el gobierno de Nariño lamentamos el vil asesinato del intendente Jaime Vega y el patrullero Edison Muñoz, de la Policía de Cumbal”, dijo.

Según las primeras indagaciones, al parecer, el crimen podría estar relacionado con lo sucedido en los últimos días, dijo el funcionario, quien se refirió al asesinato de cuatro integrantes de la comunidad Awá y de dos personas en el municipio de Samaniego, entre ellos un periodista.

“Esto nos preocupa muchísimo, y parece que en algunas regiones de Nariño aún no se ha firmado la paz”, dijo Viteri.

Cabe mencionar que en el febrero de este año fueron asesinados bajo la misma modalidad del plan pistola los patrulleros Álvaro Martín Marín y Juan Carlos Barreto Guzmán, acribillados por presuntos integrantes del Eln en el municipio de El Tambo, a 40 minutos de Pasto.

La Policía de Nariño lamentó, rechazó y condenó el hecho. “Cuando cumplían con su deber en pro de la seguridad y la convivencia en esa región del país, sujetos armados atacaron en la vía pública a nuestro hombres; ellos adelantaban labores de control y vigilancia en una zona bancaria del municipio nariñense”, aseguró la institución en un comunicado de prensa. Asimismo, envió un mensaje de solidaridad a los dolientes de los agentes asesinados.