La Alcaldía de Pamplona dotó con chaleco, carné y talonario a cada uno de los integrantes de la Asociación de Sordos de Pamplona (Asorpam), quienes están avalados por el municipio para controlar el parqueo en las zonas azules.

Así, a partir de la fecha quienes tienen la responsabilidad de cobrar por el estacionamiento de vehículos son identificados con un chaleco de color azul.

La Alcaldía autorizó como zonas azules las siguientes vías: calle 8 pasaje Los Miserables, calle 7 con carrera 7, Teatro Cecilia y San Andresito, carrera 7 Asilo San José y templo de Santo Domingo.

La carrera 8 sector de Corponor, la carrera 5 del Sena y la carrera 4 con calle 5, donde está la Casona de la Universidad de Pamplona.

La Inspectora de Tránsito, Martha Rozo Rey, dijo que el convenio busca fortalecer la inclusión social y de darle trabajo a las personas discapacitadas. 

Para que la comunidad acate estas disposiciones se socializó la medida con los comerciantes y vecinos de las antiguas y nuevas zonas azules.

Pese a ello hay conductores que tratan mal a los discapacitados y “si continúan las agresiones los responsables serán denunciados y se tomarán medidas para que esos hechos no sigan ocurriendo en la ciudad”, manifestó Rozo.

Le puede interesar Cúcuta: integran a las TIC a ciegos y sordos

El cobro

Los responsables de las zonas azules están autorizados por la Alcaldía para cobrar $1.000 por el estacionamiento de los automotores, fracción hora.

Los dineros recaudados serán distribuidos así: el 90 por ciento será para la Asociación y el restante deberán consignarlo a una cuenta de la Administración Municipal.

Los mismos serán destinados para el mantenimiento de los sectores donde están habilitadas las zonas azules.