La Policía española incautó unos 150 kilos de cocaína en la madrileña estación de tren de Atocha y detuvo a cuatro personas integrantes de una organización de narcotraficantes, entre ellos su cabecilla, que se desplazó a España desde Colombia para supervisar la operación.

La organización introducía la droga procedente de Colombia en España vía marítima, a través de barcos, que hacían escala en el puerto de Huelva y desde allí la trasladaban por carretera hasta Madrid en vehículos preparados para ello, donde era recogida por los miembros de la red encargados de su distribución, informó hoy la Policía.

Abortado el pase de unos 150 kilos de cocaína en la estación de Atocha, en #Madrid

La droga fue transportada desde #Huelva en vehículos “caleteados”. Más info https://t.co/pPDSeCi4yh pic.twitter.com/6L3yIjFIJv

— Policía Nacional (@policia) 16 de abril de 2019

La investigación comenzó el pasado mes de noviembre cuando los agentes supieron de esa organización que introducía la droga en España para su posterior distribución por Europa, y tras varias gestiones, comprobaron que había enviado un cargamento de cocaína oculto en el casco de un barco portacontenedores que navegaba regularmente desde Colombia hasta Europa, con parada en Huelva.

Era tal su grado de profesionalidad que para la extracción de la droga contaban con buzos especializados a su servicio, según la fuente.

Los investigadores averiguaron que el pase de la droga se iba a realizar en las inmediaciones de la estación madrileña, por lo que establecieron un dispositivo en la zona y detectaron al líder de la red, quien entregaba las llaves de un vehículo a otro miembro de la organización que supuestamente se iba a encargar de recoger y ocultar la droga.

Durante la operación fueron detenidas otras tres personas relacionadas con la organización, que se encontraban en la zona.

En la inspección al vehículo los policías descubrieron 58 paquetes de cocaína y localizaron otro turismo en las inmediaciones con 77 paquetes más, en total unos 150 kilos de cocaína, así como unos 2.500 euros.