Philip Morris y la Federación Nacional de Departamentos (FND) sellaron un acuerdo de $15.000 millones para este año para la lucha contra el contrabando de cigarrillos en todo el país.

“La destinación de los recursos dependerá de los criterios que la Asamblea de Gobernadores y los resultados del último estudio de contrabando”, aseguró el director ejecutivo de la FND, Carlos Camargo.

Los dineros servirán para fortalecer el “sistema informático, la Policía fiscal y aduanera, la Fiscalía y todos los grupos de rentas departamentales para ver cómo, cuándo y por qué se está dando el contrabando”, afirmó el Contralor de la República, Carlos Felipe Córdoba.

El funcionario está preocupado porque este flagelo (contrabando de licor, cerveza y cigarrillos) impacta en $1,6 billones a los recursos para la salud, educación y recreación.

La evasión de aportes parafiscales llega a $5,4 billones y alrededor de un billón se pierde por los juegos ilegales de azar. Al año están dejando de llegar al erario alrededor de unos $8 billones.

De acuerdo con el presidente de Coltabaco, filial de Philip Morris, Carlos Serrano, las cifras recogidas por la firma muestran que el mercado ilegal duplicó su presencia desde 2016.

Según los cálculos de la consultora, de una cajetilla de 20 cigarrillos, la mitad se destina a las “arcas públicas de los departamentos”, lo que implica una relación entre el menor recaudo y un mayor volumen de contrabando.

Serrano resaltó que en 2018 la afectación pública fue cercana a los $440.000 millones, que serían invertidos en salud, educación e infraestructura.