El juez 22 Penal Municipal de Cali condenó a seis años y cuatro meses de prisión a Juan Bautista, el Negro, a quien encontró responsable de los delitos de extorsión agravada e injuria.

Durante las audiencias de individualización de pena y sentencia, Bautista aceptó los cargos. 

Además, el hombre deberá pagar una multa de 1.350 salarios mínimos legales vigentes a las víctimas mujeres, entre ellas periodistas de Cali y Bogotá, a quienes acosó por años, a través de las redes sociales y llamadas telefónicas, para que salieran con él. 

Los números telefónicos de las víctimas los obtenía a través de llamadas reiteradas, hasta de seis horas, a los medios donde las comunicadoras laboran.

“Cuando las periodistas no atendían sus llamadas ni requerimientos por redes, el Negro bajaba las fotos de los perfiles de ellas de Facebook, les hacía montajes en páginas de pornografía y las distribuía en redes sociales, calificándolas de prepagos y prostitutas”, según la investigación de la Fiscalía especializada. 

A otras víctimas les ofrecía trabajo en campañas publicitarias con famosas marcas,  haciéndose pasar por empresario de ropa, por lo que les pedía fotos, y cuando se negaban a salir con él, las subía a las redes para exponerlas como mujeres prepagos. 

El hombre fue capturado en noviembre pasado en un hotel del barrio El Firme de Buenaventura.

El Negro es el mismo que la periodista Angélica Chica, de Qhubo Cali, denunció tras ser acosada por varios meses. 

En un revelador relato, la comunicadora da detalles del modus operandi de Bautista.

Testimonio

Angélica Chica, periodista desde hace 13 años de Q’hubo de Cali, dijo que una madrugada recibió una llamada de un hombre que dijo ser su admirador. Pero, al colgarle, el hombre se disgustó.

Minutos después recibió un mensaje de texto, tan perverso como su ortografía.

“Quieres que daye tu cara con axido. Saves que Cali es Peligrosa. Tu como periodistas lo saves. Le quedaste mal ha una persona. Se donde vive. Asi como tengo tu numero podemos matarte (sic)”,

Pero, antes de que saliera el sol, el hombre volvió a llamarla. Otra vez con sus amenazas de muerte.

“Apagué mi celular y esperé entonces que llegara el lunes para poner a las autoridades al tanto de mi situación”, señaló la comunicadora.