Miles de personas se han registrado en Táchira como voluntarios para ayudar a recibir, almacenar, clasificar y distribuir la ayuda solidaria que se espera comience a llegar desde Colombia por la frontera a partir de este sábado 23 de febrero.

Los hermanos Leonardo y Reynaldo Manrique, líderes del movimiento estudiantil durante las protestas de 2014, fueron los designados por la Asamblea Nacional para coordinar estas acciones en la entidad.

“Nuestro trabajo es absolutamente gratuito, solo nos mueve el interés de colaborar a cambiar las cosas, contribuimos como conductores de los lineamientos emanados desde la Asamblea Nacional, pero el voluntariado está integrado por los diferentes colegios profesionales (médicos, enfermeras, contadores, abogados, transportistas), cada cual colaborando desde sus fortalezas”, dijo Reynaldo Manrique al tiempo de agregar que también los partidos políticos se han organizado con sus liderazgos municipales y parroquiales, las ONG vinculadas al área de salud, grupos sociales organizados, todos trabajando en un objetivo común: el óptimo manejo de los insumos y alimentos enviados para atender las necesidades más urgentes de los grupos más vulnerables de la población.

Explicaron que la logística para el transporte desde la frontera hasta San Cristóbal, en Venezuela, se está coordinando con los sindicatos de transportistas, que la recepción de los medicamentos estará a cargo de la Corporación de Salud y que la parte alimenticia sería manejada por Cáritas, quien ya tienen amplia experiencia en la atención alimentaria de los más necesitados.

“Una de las principales tareas del voluntariado es de contraloría, para garantizar absoluta transparencia en el manejo de estos insumos”, agregó por su parte Leonardo Manrique quien apuntó además que en el manejo y traslado se cumplirán todos los protocolos establecidos a nivel internacional en lo relacionado con ayudas humanitarias.

“Estimamos que van a ingresar inicialmente unas 500 toneladas, que estarán destinadas a atender a niños en estado de desnutrición, hospitales, abuelitos en ancianatos que también tienen dificultades alimentarias, y para ello contamos con el apoyo de Unicef, del Consejo de Protección de Niños y Adolescentes, de Cáritas, la gobernación del estado Táchira, entre otras instituciones”, expresaron. Desde Táchira se distribuirá también ayuda a los estados del suroccidente Venezolano.

Destacaron que inicialmente “lo que entrará será medicina de atención primaria, los medicamentos especializados como quimioterapias, insulina, entre otras… que requieren un manejo más delicado como la garantía de la cadena de refrigeración, también, sólo ingresará a Venezuela una vez está asegurado el corredor humanitario, pues como hay una posible resistencia, no podemos exponer este tipo de ayuda”, dijeron.

A la frontera “si o si”

Los coordinadores de los diferentes grupos de voluntarios en Táchira están conscientes de las dificultades y los retos que supone hacer posible el ingreso de la ayuda almacenada en los depósitos aduanales del lado colombiano del puente de Tienditas, uno de los pasos formales que unen a Táchira con Norte de Santander, y para ello se han propuesto una movilización masiva hacia la frontera para este 23 de febrero.

“El presidente (e) Juan Guaidó va a convocar una gran caravana hacia la frontera, también hay unas 2 mil o tres mil personas dispuestas a ir caminando, en una gran peregrinación, ya nos han confirmado que viene gente de Mérida, de Zulia”, dijo por su parte Eduardo Delgado, dirigente del partido Primero Justicia, quien precisó que la peregrinación partirá desde el Elevado de Puente Real en San Cristóbal hacia San Antonio del Táchira el día jueves 21 de febrero a las 12 del mediodía.

Explicó que se ha organizado una ruta de encuentros, donde los peregrinos que parten de San Cristóbal irán sumando apoyos a medida que pasen por las poblaciones intermedias. “Hay un grupo que se sumará en Zorca, también habrá un gran encuentro con los peregrinos que se están organizando en Capacho, hay gente que se incorporará desde La Mulera, y el objetivo es llegar el viernes a la frontera con el mayor acompañamiento posible porque la ayuda humanitaria va a entrar “si o si”, enfatizó.

Para los caminantes se han establecido puntos de recolección en la Universidad católica, la universidad de Los Andes y el icónico Obelisco de los Italianos, donde quienes no puedan movilizarse podrán contribuir aportando agua embotellada, frutas, galletas y medicamentos básicos que sean de utilidad a los caminantes, “todos pueden colaborar en la medida de sus posibilidades para que el ingreso de la ayuda y la apertura del corredor humanitario sean finalmente una realidad”, destacó Delgado.

Con lo recolectado, se establecerán varios puntos de hidratación y atención primaria, a lo largo de los 37 kilómetros de caminata.