La negativa del pamplonés Fredy Alexander Cañas Conde, para levantarse de la cama, cuando uno de sus hijos de 5 años se le acercó en la mañana del domingo, fue el presagio de la mortal historia que se desencadenó en ese momento.

Cuando eran las 10:00 de la mañana, luego de que el menor de edad intentara persuadir sin éxito a su papá, generó que la pareja de Cañas descubriera que su ser querido estaba herido con una puñalada en el pecho, que después le cobró la vida.

Cañas estuvo tomando cerveza durante la noche del sábado y arribó a su casa, ubicada en el barrio Santa Martha de Pamplona, a las 6:00 de la mañana del domingo, adonde llegó a dormir sin decir que estaba herido.

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Sin embargo, cuatro horas después, Fredy Alexander contó que había sido apuñalado y golpeado, al parecer, en medio de un atraco.

“Él estaba pálido y le dijo a la esposa que no tenía alientos para levantarse. Cuando ella le revisó la herida, vio algo diminuto y alrededor no había sangre”, dijo una hermana de la víctima.

En una cobija que estaba sobre la cama quedó solamente una gota de sangre, por lo que sus parientes no se habían percatado de que Cañas Conde estaba herido y muriendo lentamente.

De inmediato, algunos familiares lo trasladaron al hospital de Pamplona, adonde Cañas alcanzó a llegar con vida, pero segundos después, dejó de existir.

Según los médicos, la herida alcanzó a perforar un pulmón, lo que finalmente le costó la vida.

La única pista que tienen las autoridades y familiares sobre el hecho, es que el agresor, al parecer, es un conocido de la víctima.

Su esposa llegó a buscarlo a un establecimiento nocturno, a las 9:00 de la noche del sábado, donde Fredy Alexander estaba jugando pool, pero él se negó a irse para la casa.

La última vez que lo vieron disfrutando de una noche de fiesta, fue a las 3:00 de la madrugada, en compañía de algunos amigos.

“Mi hermano llegó sin papeles a la casa y sin unas herramientas de trabajo que tenía”, explicó la familiar de la víctima.

Instructor de bandas

Cañas Conde era reconocido en Pamplona por su sobresaliente labor como instructor de bandas marciales, a las que estuvo vinculado desde niño.

En los últimos seis años dirigió la banda de San Francisco, en la que consiguió varios reconocimientos en diferentes ciudades por su participación.

Además, fue instructor de la banda del colegio Andrés Bello, en Bochalema.

Cañas alternaba sus funciones como instructor, con el oficio de construcción.

“Hizo una cabaña en Bucaramanga. La gente lo buscaba para los trabajos, por su creatividad”, explicó su hermana.

Por ahora, los familiares y amigos de Fredy Alexander Cañas Conde, esperan que las autoridades adelanten las investigaciones para esclarecer los móviles del homicidio. La Policía de Norte de Santander, en conjunto con la Fiscalía, inició las pesquisas del caso.