Una de las heridas relató que una mujer la contactó para que invitara gente a una excursión gratuita a Perú.
Las pistas que podrían empezar a aclarar el misterio del accidente de bus en Ecuador

Hacia las 5:00 de la madrugada, tan solo cinco minutos después de que al hospital San Francisco de Quito llegaran tres de las heridas por el accidente del bus colombiano en Ecuador, un hombre delgado, de aproximadamente 1,75 de estatura, llegó hasta ese centro asistencial preguntando insistentemente por una de las afectadas.
Claudia Jimena Orozco fue el nombre que el extraño consultó varias veces en el punto de información de emergencias (urgencias) de ese centro asistencial. A pesar de que también le quisieron dar el parte médico de las otras afectadas, al hombre no le importó mucho.
“Él se identificó como colombiano y preguntó en repetidas ocasiones por la señora (…) afortunadamente ella estaba bien. Yo no vi malicia en su requerimiento”, dice un empleado del hospital.
Efectivamente, la consulta del hombre no tenía nada extraño, salvo un detalle: desde el lugar del accidente (vía Pifo y Papallacta) hasta el hospital San Francisco, norte de Quito, hay dos horas conduciendo sin tráfico. El percance ocurrió a las 2:55 a.m. El extraño se dio cuenta casi en tiempo real del acontecimiento y del destino médico de los heridos, que fueron repartidos en varios hospitales de la capital de Ecuador.
¿Cómo lo supo tan rápido? Es otra de las incógnitas que se le suman a este trágico viaje, que fue organizado precisamente por Claudia, según le contó Martha Isabel González, una de las heridas, a Blu Radio.
A esa emisora, la mujer le relató que Claudia la contactó para que invitara gente a una excursión gratuita a Perú.
También relató que luego de que el bus se varara por dos días en San José de Isnos, Huila, la organizadora les pidió que no abandonaran el viaje.
“Ellos nos decían que tranquilos, que ya iban a reparar el bus, que no nos fuéramos”, dijo Martha. Había una clara intención de que el vehículo no se quedara vacío.
Además dejó entrever que Claudia estuvo al tanto del repentino cambio de rumbo en Popayán, donde se desviaron por una carretera destapada hasta el Huila, una vez ahí, el bus presentó supuestos problemas en la caja de cambios.
“Nosotros preguntamos por qué el cambio de ruta y ellos nos dijeron que la vía Panamericana estaba cerrada”. Sin embargo, esa afirmación resultó ser falsa, porque de acuerdo al reporte de Invías, en ese paso vehicular no hubo ninguna alteración.
El bus salió el 5 de agosto de Cali con rumbo a Perú, según lo prometido por los organizadores.
Le puede interesar Cuerpos de colombianos fallecidos en Ecuador no han sido reclamados por sus familiares
El contrato de viaje era Neiva - Pitalito - Mocoa - Villa Garzón - La Hormiga - San Miguel - Ecuador - Lago Agrio y viceversa. Sin embargo, el vehículo viajó por Cali - Villarica - Tunía - Popayán - Coconuco - San José de Isnos y Ecuador, según información suministrada por la Superintendencia de Puertos y Transporte.
En ese cambio de ruta, recogieron a unos venezolanos en el Huila. Mientras el bus estuvo inhabilitado, los pasajeros pasearon y durmieron en hostales. Les brindaron todas las garantías para que siguieran en el viaje.
Cuando pasaron la frontera con Ecuador hubo cambio de conductor, el bus quedó al mando del asistente, quien perdió el control del automotor, no pudo contener los nervios para sortear la falla en los frenos y se llevó un campero por delante, luego volcaron y la mayoría de pasajeros quedaron extendidos en la vía, sin nada más que la ropa que llevaban puesta. Muchos murieron en el sitio.
No obstante, Claudia sí habría tenido tiempo de avisar al extraño que se habían accidentado. Al menos esa es la única explicación -por ahora- para su rápida aparición en el hospital.
En el centro de salud, Claudia logró el alta médica diez horas después del accidente, y según el personal del hospital, no ha vuelto ni ha llamado a preguntar por la suerte de Nathalia Ramírez y Cecilia Pantoja, las otras dos mujeres que ingresaron con ella el día del accidente.
En el barrio El Guabal y San Judas, sur de Cali, de donde son la mayoría de afectados por este accidente, que deja hasta el momento 24 muertos y 22 heridos, nadie conoce a Claudia. Su puente en este sector fue Martha.
“Ella me dijo en los primeros meses del año que consiguiera gente para una excursión gratuita. Yo invité a una amiga y ese amiga invitó a otra y se fue regando la bola”, comenta Martha, quien está recluida en el hospital Eugenio Espejo, sur de Quito.
Sobre el paradero de Claudia y el hombre que gestionó su salida del hospital no se sabe nada. Quizá con su aparición se revelen más pistas para esclarecer este viaje irregular.
Ayúdanos a seguir haciendo periodismo de calidad
Contribuye aquíComentarios
+ NOTAS
Duque sostuvo encuentro con Lenín Moreno en la frontera
El mandatario sostuvo conversaciones con Lenín Moreno sobre diferentes temas.
Antes de morir, Ana Benilda Becerra salvó a sus vecinos
Un cortocircuito provocó la tragedia en el barrio La Castellana.
La avenida del Río será más deportiva y familiar
El centro de pensamiento del Área Metropolitana tiene unos 61 proyectos estructurados para Cúcuta.
COVID-19, en aumento en la región de Pamplona
Se conocen casos de gente de los municipios de la provincia y de Toledo que llegan a la región a hacerse la prueba de coronavirus.
La delegación regional que estará en la Vuelta al Táchira 2021
Tres equipos representarán a Norte en la edición 56 de esta clásica del continente.
La muerte sigue rondando por La Parada
Jonathan José Seijas llegó hace unos meses a La Parada a trabajar pasando gente y mercancía por las trochas.
Desde hoy, alcaldía empieza a expedir paz y salvo de predial
La Secretaría de Hacienda informó que en esta oportunidad el documento se entregará mucho más pronto que años anteriores.
Tercer toque de queda se cumplió dentro de lo presupuestado
En total fueron impuestos 843 órdenes de comparendo en la ciudad y el área metropolitana.
La pandemia obliga a postergar los retiros espirituales
“No existen condiciones para el encuentro", Jairo López, presbítero de la catedral de Santa Ana.