“Los profesionales médicos no están recibiendo los pagos de manera oportuna, quienes además en muchas ocasiones, deben asumir extensas jornadas de trabajo, algunas impuestas por ellos mismos, para poder obtener alguna remuneración que les permita vivir”. 

Con estas palabras, la doctora Luz María Gómez Buitrago, subdirectora científica de la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación (Scare), manifestó su preocupación por la situación que viven cientos de médicos y especialistas del país, ante el incumplimiento de los pagos oportunos y la carencia de condiciones dignas en el ejercicio de su profesión, por parte de algunas Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS).

Gómez explicó que, frente a la crisis que tiene el sistema de salud, se ha venido aplazando el pago a los profesionales médicos hasta por períodos superiores a seis meses.

Sostuvo que ante los procesos de liquidación de EPS y IPS se encuentra que no se les pagó a los médicos, a quienes se les rechazó las solicitudes de cobro realizadas, lo cual es una situación más que preocupante en el sector.

A lo anterior se suma que muchos de los médicos y especialistas están vinculados bajo diversas modalidades de contratación, las cuales no ofrecen  garantías mínimas tales como estabilidad en la vinculación, prestaciones sociales ni vacaciones, como en el contrato de prestación de servicios “en las cuales deben mantenerse unas condiciones adecuadas de remuneración,  pagos  puntuales, entre otras”.

Denunció que hay casos de algunas instituciones donde hacen trabajar a los médicos sin contrato y además les descuentan una parte de la remuneración como mecanismo anticipado en caso que la cuenta del paciente sea glosada. Estas prácticas se han puesto de presente ante las autoridades competentes y afortunadamente se han disminuido.

Bajo este panorama, la médico Gómez hico un llamado al Gobierno Nacional para que contemple una regulación que promueva el trabajo digno con jornadas de trabajo adecuadas, regulación que existe en el ámbito del sector público, pero no en el privado, lo cual debe ser un tema prioritario. 

Adicionalmente, debe garantizarse el pago oportuno y justo, seguridad en el trabajo, prestaciones, y capacitación, entre otras.

“Esto traería beneficios, no sólo para los médicos y especialistas, sino para las Instituciones Prestadoras de Salud y especialmente para los pacientes”, destacó la subdirectora científica de la Scare,  quien recalcó la necesidad de contar con todos los elementos necesarios para la prestación del servicio.

Subrayó también la necesidad de abrir espacios para la actualización de conocimientos, ya que son muy pocas las instituciones de salud que brindan a sus médicos la oportunidad de estudiar y mantenerse  actualizados acerca de las tendencias, innovaciones y retos de la medicina.