El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en el acto en que zarpó un crucero oficial, anunció: “He ordenado a la Fuerza Armada Nacional, junto a nuestro pueblo en unión cívico-militar, hacer las operaciones de defensa multidimensional integral del territorio de nuestra patria, las operaciones y ejercicios militares Independencia 2018”.

Aunque el líder chavista se definió como un “pacifista” dijo que Venezuela debía “prepararse para ganar esa paz”, una tarea que, aseguró, es responsabilidad de la FANB, los ciudadanos, la reserva militar y la Milicia; integrada por quienes sin ejercer la profesión militar manifiesten voluntariamente el deseo de ingresar en el cuerpo.

“El 24 y 25 de febrero vamos a afinar la puntería de los equipos, vamos a afinar el movimiento de las tropas, vamos a afinar el movimiento de los tanques, de los misiles, aviones, helicópteros y, sobre todo, vamos a afinar la puntería del alma nacional”, expresó.

La llamada revolución bolivariana ha ordenado ejercicios militares masivos los últimos años, generalmente tras tensiones diplomáticas con Estados Unidos, país al que Caracas acusa de injerencia y conspiración contra Maduro.

En este sentido, el mandatario venezolano reiteró, ayer, tras anunciar los ejercicios: “Venezuela es una tierra sagrada. No nos metemos con nadie pero jamás aceptaremos que la bota militar imperial extranjera toque el sagrado suelo de la patria venezolana. Jamás”.
   
Maduro sostuvo el viernes pasado que el Ejército colombiano entrena venezolanos para simular ataques y justificar un “conflicto armado”.
 
Las nuevas prácticas serán “para demostrarle al mundo que Venezuela se respeta, que Venezuela es territorio de independencia”, subrayó el presidente y candidato a la reelección en los comicios anticipados el 22 de abril.
   
El gobierno socialista suele hacer demostraciones militares en las que participan civiles. La más reciente tuvo lugar en agosto pasado y, según Maduro, participaron más de un millón de “combatientes”.