Según datos de la empresa Ecopetrol, a Tibú habrían llegado 16.6 mil millones de pesos destinados a la compra de bienes y servicios para el desarrollo de las operaciones de la petrolera. 

La entidad afirmó que para 2015, la compañía realizó negocios por 2.400  millones de pesos con los proveedores de la zona, mientras que para el siguiente año el valor se triplicó hasta llegar a 7.700 millones de pesos.

Entre enero y agosto de este año, se concretaron negocios por unos 6.500 millones de pesos. 

La explicación a esta mejoría en las relaciones comerciales entre la empresa y los proveedores, se explica en el aumento de los precios del petróleo durante los años 2016 y 2017, que comprueban el incremento del flujo de recursos, en comparación con el año 2015.  

Adicionalmente, las cifras con corte a agosto de este año indican que hay 31 contratos en ejecución con 22 empresas tibuyanas.

Los servicios que se han ejecutado se relacionan con rocería, mantenimiento, salud, obras civiles, energía, consultoría, entre otras. 

Pese a las cifras, para la Unión Sindical Obrera (USO) Tibú la práctica de la tercerización “destruye” la economía local de los municipios con influencia de petrolera, en especial porque los contratistas han dejado deudas por las que “luego nadie responde”.

Por su parte, la empresa indicó que para agosto de 2017 se tiene un registro de 462 oportunidades laborales, de las cuales 264 corresponden a mano de obra no calificada proveniente, en ciento por ciento, de Tibú. 

“Las restantes 198 personas (el 81 por ciento) correspondió a mano de obra formada y también son del mismo municipio, superando el 30% estipulado por norma”, señaló la entidad. 

Aunque los datos resultan favorables, para las comunidades de la zona la invesión y actividades aún no son suficientes, debido a que el beneficio por las obras es de impacto limitado, como ha ocurrido con la entrega de tubería en desuso que la empresa entrega a las alcaldías.