A pesar de que el Clan del Golfo le manifestó al presidente Juan Manuel Santos la intención de someterse a la justicia, aún no hay una respuesta oficial. En la frontera de Norte de Santander con Venezuela, las autoridades no bajan la guardia para ubicar al cuarto cabecilla de esta banda: Luis Orlando Padierna Peña, ‘Inglaterra’.

Por la búsqueda de este hombre, recientemente las autoridades lanzaron un operativo en el corregimiento de San Faustino (zona rural de Cúcuta) que dejó a cinco hombres muertos, además de un teniente del Ejército.  

“Después de los duros golpes de la Policía, Dairo Antonio Úsuga, ‘Otoniel’, máximo cabecilla del Clan del Golfo, decidió que ‘Inglaterra’ tomara las riendas de esa organización en esta zona (Norte de Santander) y siguiera dominando el negocio de las extorsiones, narcotráfico y contrabando”, aseguró un investigador judicial, que pidió reserva de su identidad.

La fuente indicó que debido a las operaciones armadas, entre ellos mismos se atacaron y se dividieron en disidencias en el área metropolitana. 

“Conocimos que llegaron a dar la orden de que se buscara gente que no fuera de Cúcuta, porque ya no confiaban en nadie de acá”, explicó el investigador.

La desconfianza fue tal, que ‘Inglaterra’, de 36 años, llegó el 17 de abril a Cúcuta con la orden de reagrupar a sus hombres para tener un dominio total de la frontera y consolidar una ruta internacional del narcotráfico hacia Venezuela. 

La orden también apuntaba a una disputa interna, de ser necesaria.

La guarida

Lo primero que hizo Padierna fue buscar un sitio seguro donde vivir, porque la Policía y el Ejército le estaban siguiendo el rastro desde Urabá. Por eso, decidió quedarse en el corregimiento de San Faustino, en las zonas que estuvieran muy cerca a la frontera con Venezuela.

Solo dos semanas tardó ‘Inglaterra’ en desencadenar enfrentamientos contra Los Rastrojos, que hasta ese momento dominaban esta parte de la zona rural de Cúcuta. 

Según las cifras oficiales, esta ‘guerra’ ha dejado 14 muertes violentas en San Faustino, entre ellas la de Orlando Bocanegra Arteaga, excomandante del Frente Fronteras de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).

La Policía aseguró que ‘Inglaterra’ fortaleció al Clan del Golfo, que actualmente tiene 104 integrantes que se mueven por las veredas de los corregimientos Guaramito, San Faustino y Ricaurte, del lado colombiano, y las poblaciones Pategallina, Guarumito y La Cachamera- sector La Popa, del lado venezolano.

La ofensiva

Después de un trabajo sigiloso, el pasado 28 de agosto la Policía, el Ejército y la Fuerza Aérea lanzaron la operación para atrapar vivo o muerto a ‘Inglaterra’, quien se movía  con  cerca de 30 hombres por la vereda Los Negros de San Faustino .

Después de cuatro días de combate, la acción dejó además de los cinco presuntos miembros de esa organización muertos, diez capturados, entre ellos cuatro heridos.

También se contó la incautación de nueve fusiles, una mira telescópica, 250 balas, una pistola, una granada de mano, 17 equipos de campaña, material de intendencia y comunicaciones.

El teniente del Ejército muerto fue identificado como Estiven Torres Mosquera, quien recibió un disparo. Un helicóptero resultó averiado luego de recibir unos balazos.

De Luis Orlando Padierna Peña se conoció que resultó herido y que el segundo al mando de su estructura, ‘Leo’, también recibió unos algunos tiros. 

Las autoridades establecieron que los dos hombres fueron trasladados hacia Venezuela para su recuperación.

El prontuario

Luis Orlando Padierna Peña, tiene 15 órdenes de captura por homicidio agravado, narcotráfico, desaparición forzada, porte ilegal de armas y conformación de grupos ilegales. 

Asimismo, en julio de 2014 fue incluido en la lista Clinton por el departamento del Tesoro de los Estados Unidos.

‘Inglaterra’ tiene una trayectoria de más de 20 años delinquiendo en grupos paramilitares y narcotraficantes.  Este hombre es considerado un objetivo de alto valor, tras ser señalado de derribar un helicóptero en el que murieron 16 policías, el 4 de agosto de 2015, en el Urabá Antioqueño.