La tonalidad rojiza que tomó el río Zulia desde hace un mes, y se acentuó en los últimos días, tiene en alerta a los habitantes de la zona que aseguran que por este fenómeno se redujeron las visitas de los turistas.

Para Luis Alberto Gómez, exacalde y veedor ciudadano, la situación es preocupante por la “falta de control ambiental del río”, razón por la cual solicitó una inspección general del afluente, así como seguimiento de las licencias otorgadas en el área de influencia del río.

Según Gómez, el hecho podría derivarse de “abusos en la explotación, que contaminan el río”. 

Gregorio Angarita, director de Corponor, manifestó que el caso fue atendido ayer, con la visita de una comisión técnica que tomó muestras del agua, de las cuales se espera un informe detallado. Afirmó que en visitas anteriores se comprobó que “aguas arriba del puente no se percibe el origen de la turbidez”, razón por la que se está consiguiendo apoyo aéreo, o tecnológico con el uso de drones, para hallar el punto que genera la afectación.