Por incumplir las disposiciones del sistema obligatorio de garantía de calidad en salud, el director del Instituto Departamental de Salud (IDS), Juan Alberto Bitar, le solicitó a la Superintendencia Nacional de Salud que intervenga, de manera inmediata a las EPS Cafesalud y Coomeva.

El funcionario reveló que la decisión se produce ante “la inoperancia que han mostrado dichas entidades prestadoras de salud, para el pago oportuno de cartera a los prestadores de servicios, la falta de red prestadora de servicios de salud y la no legalización de contratos con prestadores de servicios, hecho que atenta contra la vida de los usuarios.

Otros llamados

Este llamado se suma a los que otras instancias de gobierno han hecho al titular de la Supersalud, Norman Muñoz, para que de una vez por todas no solo declare la alerta roja, sino que se defina la hoja de ruta para garantizar la plena prestación de los servicios de salud a los nortesantandereanos, dijo Bitar.

El funcionario dijo que en las mesas de trabajo que se han conformado a lo largo del presente año se han evidenciado hallazgos tales como la limitación y/o suspensión en la continuidad de prestación de servicios de salud contratados por las EPS Cafesalud y Coomeva, por mora mayor a 360 días de cartera.

Los prestadores de servicios de salud están en riesgo financiero por falta de pago oportuno por las EPS.

Asimismo, estas entidades no cuentan con red prestadora de servicios para mediana y alta complejidad, ni para urgencias, dijo Bitar.

Autorizaciones represadas

Agregó que hay represamiento de autorizaciones de servicios de salud para especialidades y procedimientos médicos, y represamiento en traslados de usuarios hacia otros departamentos, como Santander, por parte de Coomeva. Esta EPS no contrata con prestadores de servicios de salud habilitados para Norte de Santander, que ofertan y prestan servicios especializados.

Cafesalud solo cuenta con una IPS de mediana complejidad, que brinda servicios de urgencias, hospitalización, cirugía y UCI la cual, debido al gran número de pacientes que acude a los servicios, supero su capacidad instalada superada.

Bitar dijo que la declaratoria de alerta amarilla del Hospital Universitario Erasmo Meoz es fruto de la crisis de la salud que padece Cúcuta, debido también a la alta cartera morosa de las EPS, pero también por la sobrecarga de atención de pacientes de las EPS Cafesalud y Comeva.

La intervención administrativa ha sido solicitada ante la Superintendencia Nacional de Salud en los meses de junio, agosto y noviembre de 2016, y 7 de marzo de 2017, pero en ninguna de las ocasiones el titular de ese órgano de salud ha dado una respuesta.

Muñoz no le respondido tampoco a La Opinión los reiterados llamados que se hicieron a través de su oficina de prensa para conocer un concepto suyo sobre esta crisis de la salud que afronta Norte de Santander.