Cargando un fuerte gravamen por la caída ante Paraguay, Ecuador deberá recomponer sus filas y no caer en el desvelo para el próximo partido con Colombia, estratégico para sus planes de llegar a Rusia-2018.

La tricolor fue marginada de la zona de clasificación al perder 2-1 el jueves en Asunción, por la decimotercera fecha de las eliminatorias sudamericanas, restándole duros compromisos como ante Brasil y Argentina.

Ecuador quedó quinto con 20 puntos, a diez del líder Brasil y por encima de Chile apenas por mejor saldo de gol diferencia (5 contra 3). Ahora está en zona de repesca.

De seis puntos disputados con el elenco guaraní, los ecuatorianos -que tuvieron un brillante arranque con cuatro triunfos en línea- apenas lograron uno al igualar (2-2) hace un año en Quito, en la quinta jornada.

“Eso puede estar hipotecando las posibilidades de clasificación (de Ecuador) a Rusia”, dijo el viernes a la AFP Fernando Carrión, investigador ecuatoriano sobre sociología del fútbol.

Señaló que “es lamentable” el revés ante Paraguay, que “no mostró buenas virtudes” y que volvió a desnudar la zona defensiva, que se ha convertido en un lastre para el objetivo mundialista del técnico Gustavo Quinteros.

Carrión añadió que “no se han hecho los recambios necesarios y creo que el problema más difícil que tiene hoy día el entrenador Quinteros es la zaga. Tenemos muchos problemas con los dos carrileros, y ni se diga con el centro de la zaga”.

“Parada de burros”

El extimonel de la tricolor, Sixto Vizuete, apuntó a su vez que “hay jugadores que no han estado jugando en sus equipos y fueron convocados”, lo que “no es factible” en momentos críticos en los que Ecuador debía fortalecerse en la zona de clasificación.

“Tuvimos una ‘carrera de caballos, parada de burros’ porque inicialmente fueron cuatro partidos jugados y ganados. De allí para acá, la cosa se ha puesto cuesta arriba, se ha hecho difícil”, sostuvo Carrión.

Cuando no todo está perdido, Quinteros y sus discípulos tienen grandes retos por delante para conseguir el boleto al Mundial por cuarta vez en la historia del balompié nacional, tras el debut en la edición de 2002.

El próximo martes en Quito, Ecuador recibirá a Colombia, cuarto con 21 tantos y que en la ida venció 3-1 en la calurosa Barranquilla.

“Si queremos seguir con las aspiraciones serias, tenemos que ganar ese partido, y luego no hay que resignar puntos en casa porque va a ser fatal si es que no logramos sumar en la jornada que se avecina”, señaló Vizuete.

Ganar o ganar

Estando pegados en las posiciones, ecuatorianos y colombianos deberán luchar a muerte para marcar diferencia.

El fútbol cafetero tiene “mucha técnica, mucho toque” y Colombia “viene a jugarse el todo por el todo, lo mismo que le va a pasar a Ecuador”, manifestó Carrión, anotando que para el que pierda serán ya complicadas las posibilidades de clasificar.