Los homicidas de Luis Ernesto Rincón Rodríguez esperaron a que la víctima saliera del conjunto residencial donde vivía, para dispararle al menos 23 veces.

El crimen ocurrió a las 9:00 de la mañana de ayer, en la avenida Los Libertadores, frente al conjunto cerrado Condado de Castilla.

Según se conoció, el pistolero estaba al lado del conjunto y al ver que Rincón salió en su camioneta colombiana marca Toyota Runner, blanca, de placas HKY-956, empezó a disparar de manera indiscriminada, causándole graves heridas a la víctima en la cara, pecho y abdomen.

Tras recibir los disparos, Luis Ernesto chocó la camioneta contra un árbol. El homicida caminó en dirección hacia el vehículo y siguió disparando, luego huyó junto a un compinche que lo esperaba en una motocicleta venezolana marca Bera Socialista gris de placa AF6I23U.

Los homicidas subieron el puente de La Gazapa y tiraron  al andén un bolso con una pistola marca Glock con proveedor hechizo con capacidad para 30 balas, y un revólver.

Metros más adelante, en una trocha que conduce al barrio Prados del Este, los agresores se bajaron de la moto y huyeron en un taxi marca Kia Picanto.

Según se conoció, una hora después la Policía ubicó en el barrio La Victoria al taxista que los transportó, y quien aseguró que los había dejado en El Escobal.

Uno de los pistoleros vestía una camisa blanca con rayas de colores verde y blanco y tenía una gorra.

Según testigos, los dos hombres eran de piel morena.

A pesar de que uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta arribaron al lugar del crimen y trasladaron a Rincón en una patrulla al hospital Erasmo Meoz, la víctima llegó sin vida al centro médico.

Miembros de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) adelantaron la inspección en el lugar del ataque y el posterior levantamiento del cadáver en el hospital.

Los investigadores encontraron al menos 23 vainillas que serán sometidas a estudios balísticos.

Las autoridades iniciaron las investigaciones para esclarecer los móviles del crimen e identificar a los autores del hecho.

Los peritos judiciales revisaron los videos de las cámaras de seguridad del sector para conocer las características de los pistoleros.

De Luis Ernesto se conoció que era comerciante.

Los familiares de la víctima protagonizaron escenas de dolor en el lugar del homicidio.

La Sijín trasladó el cadáver al Instituto de Medicina Legal.

Al cierre de esta edición, la familia de Rincón adelantaba los trámites para reclamar el cadáver de su ser querido.

La Policía Metropolitana de Cúcuta adelanta las pesquisas para recolectar información que permita el desarrollo de las investigaciones.