El gobernador William Villamizar dijo que declarará en emergencia la salud en Norte de Santander, porque las EPS y la atención obligada en el hospital Erasmo Meoz a venezolanos que no pueden pagar tienen en grave crisis a todo el sistema de salud del departamento.

La decisión sería tomada hoy, obligada por una radiografía del Instituto Departamental de Salud (IDS) y de la Secretaría de Salud municipal, en el que se muestra el mal estado del servicio, en especial en el área metropolitana de Cúcuta.

También influyó la negativa de las entidades promotoras de salud (EPS) a enfrentar problemas de toda índole en relación con el servicio, que pone en riesgo la salud y la vida de los pacientes, en concepto de autoridades que han convocado mesas de trabajo que nada han podido resolver.

La declaratoria de crisis está motivada en el incremento dramático de quejas de usuarios de las EPS, la negativa de las instituciones prestadoras de salud (IPS: clínicas, puestos de salud, laboratorios), ante la falta de pago por sus servicios.

También, por los reclamos sin respuesta de la administración del hospital para que le compensen los gastos en pacientes venezolanos. El hospital no puede negarles la atención de emergencia, y los gastos son irrecuperables.

Según la ley, los entes de control regionales no pueden vigilar el sistema; los correctivos corresponden al Ministerio de Salud y la Superintendencia de Salud.

El documento revela problemas en la región como:

* Durante largos períodos no hay contratación con las IPS, por el manejo inadecuado de la cartera y la negociación de tarifas.

* Suspensión de servicios por parte de IPS con las cuales las EPS tienen contrato de prestación de servicios de salud vigentes.

* Incumplimiento en los pagos a las IPS

* Falta de capacidad de la red acorde con la cantidad de usuarios a los que debe atender.

* Carencia de procedimientos diagnósticos de alta tecnología y recurso humano en las subespecialidades médicas.

* Dificultad de las IPS para prestar el servicio intrahospitalario, debido a que el paciente dura hospitalizado más tiempo del debido.

* Insuficiencia del recurso humano farmacéutico.

* Entrega de medicamentos incompletos

* Tiempos de espera prolongados para reclamar medicamentos, en especial, los de alto costo.

* Evidentes demoras en el proceso de referencia a centros especializados por parte de las EPS.

* Estancia prolongada de pacientes en baja complejidad en espera de que las EPS autoricen el traslado a un nivel de mayor complejidad.

* Problemas de pacientes de EPS en los municipios, por la demora y la negación de los trámites de referencia y contrarreferencia hacia centros de mediana y alta complejidad.

Asimismo, el documento señala que a pesar de las visitas de inspección y vigilancia y las citaciones frente a los entes de control para plantear estrategias de mejoras y dar solución a la problemática, no se logró llegar a ningún avance con las EPS.

Por lo tanto, se decidió presentar el informe ante el ministerio y la superintendencia, para que actúen de manera urgente y tomen los correctivos necesarios, en especial, contra el régimen contributivo de Cafesalud.

Como recomendaciones, se hizo énfasis en la necesidad de análisis de la situación de los venezolanos para crear un proyecto que ayude con la atención de los mismos y verificar el cumplimiento de los pagos por parte de las EPS.

Para la firma de la declaración de emergencia en salud, Villamizar dijo que convocará al ministerio, la Superintendencia, y a los entes de control de Cúcuta y el departamento, a fin de que atiendan su llamado y sirvan como intermediarios para generar soluciones a estos problemas.

“Queremos lograr que cada uno de los responsables asuma sus funciones y sancionar a las EPS”, dijo Villamizar.

La Opinión