Tres días han pasado desde que la Corte Constitucional le dio vía libre al plebiscito mediante el cual se busca refrendar los acuerdos de paz con las Farc y las demandas ya intentan ensombrecer su camino.

Mientras que los equipos que defenderán el ‘Sí’ y el ‘No’ en las urnas empiezan a trazar las estrategias para convencer a los colombianos de su posición, el abogado Tomás Oñate busca, por todos los medios, frenar la decisión proferida el lunes por el alto tribunal.

Con ese propósito, radicó una tutela ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca en la que solicitaba que se suspendiera el fallo del plebiscito, mientras el Consejo de Estado resuelve una demanda que se presentó contra las resoluciones que autorizaron la mesa de negociación de La Habana.

Aunque la acción judicial fue admitida y entregada para su estudio al magistrado Cerveleón Padilla, el jueves en la tarde este decidió negarla por improcedente.

En el recurso de amparo, el abogado solicitaba que se suspendieran los efectos jurídicos de todos aquellos actos administrativos que se han derivado de la negociación con las Farc, al considerar que, “se determinó la entrega de territorios por parte del Gobierno para ser utilizado por este secretariado armado terrorista”.

Sin embargo, el magistrado se mostró en desacuerdo con los argumentos expuestos por el demandante, quien aseguraba que con todos estos trámites,  se le había  vulnerado su derecho al debido proceso.

“Eran consideraciones muy subjetivas y también temores de un ciudadano que tiene demandada una resolución de Presidencia que autorizó los diálogos y mientras no resuelva el juez de lo contencioso administrativo, el Consejo de Estado, no se podría adelantar un acto adicional, lo cual es equivocado”, explicó el encargado de estudiar la tutela, según informó Caracol Radio.

También el umbral

El mismo abogado Tomás Oñate radicó otra demanda ante la Corte Constitucional en contra de la decisión que le dio luz verde al plebiscito.

Según el demandante, la reducción del umbral del 50 al 13 % “trasgredió el ordenamiento constitucional y legal”.

Para Oñate, el fallo emitido por esta corporación y sus detalles “muestran el desespero encadenado por el afán del Gobierno de tramitar y dar vía libre a las propuestas que los grupos armados han establecido y así mismo lograr complacer a un grupo cuyas propuestas han estado encaminadas a favorecer intereses políticos ocultos así implique acomodar umbrales”.

Así las cosas, le pidió a la Corte tumbar el umbral por estimar que se habría violado la jurisprudencia del mismo tribunal.

El lunes, la presidenta de la Corte, María Victoria Calle Correa, explicó que la decisión de aceptar este umbral radicó en que en la historia electoral colombiana no existen antecedentes de participación igual o superiores al 50% del censo electoral y menos tratándose de elecciones nacionales.

En ese sentido, resulta válido que el Congreso haya fijado una medida que fomente la participación.

La Opinión